Hallados restos de homínidos en Atapuerca de hace más de un millón de años

En la campaña de este verano en los yacimientos de la sierra de Atapuerca, en la que han trabajado 140 personas, se han encontrado más fósiles que en ninguna de las 25 anteriores, pero también se han hallado nuevos vestigios de la presencia de homínidos en la sierra burgalesa en una fecha aún por determinar con exactitud, pero superior al millón de años de antigüedad, declaró ayer el equipo de directores de Atapuerca.

Los nuevos vestigios (una mandíbula no humana con marcas de descarnación y algunas herramientas) se han localizado en la zona de Atapuerca conocida como Sima del Elefante y superan en antigüedad a los hallados hasta ahora. Según Eudald Carbonell considera que 'estos hallazgos dan pie para pensar encontrar en próximas campañas restos de homínidos de esta época, que seguramente pertenecerán a una especie distinta a las identificadas hasta ahora y conformarán la ocupación humana en cueva más antigua de Eurasia'.

21.500 fósiles

Carbonell y los codirectores Juan Luis Arsuaga y José María Bermúdez de Castro explicaron que en la campaña de excavaciones de este mes en total se han localizado 21.500 restos fósiles, entre ellos restos de la mano y un pie de un adolescente, encontrado en una zona no excavada hasta ahora de la Sima de los Huesos. Se trata de siete huesos de pequeño tamaño, con una antigüedad de 400.000 años que confirman que la superficie con restos humanos de esta parte del yacimiento es mucho más extensa de lo que se suponía hasta ahora.

Arsuaga aseguró que los trabajos de este verano han permitido concluir que los restos de al menos 30 individuos encontrados hasta ahora en la Sima de los Huesos responden a una acumulación por 'una ocupación puntual de la cueva que no se prolongó demasiado en el tiempo'.

De hecho, los restos se han conservado en muy buenas condiciones en parte porque se encuentran cubiertos por una capa de huesos de oso prehistórico. Se trata de una acumulación de fósiles de estos plantígrados formada por restos de unos 300 ejemplares, cada uno de ellos con un peso en vida de unos 500 kilos, lo que la convierte en la mayor colección conocida hasta ahora de estos animales.