Psicólogos palestinos e israelíes acuerdan en Viena planes de cooperación
Psicólogos israelíes y palestinos han acordado esta semana, en el III Congreso Mundial de Psicoterapia celebrado en Viena, iniciar una cooperación para el tratamiento de pacientes traumatizados por la violencia. Por iniciativa de la psicoterapeuta estadounidense Judith Kuriansky, se publicará un libro sobre la experiencia profesional en Oriente Próximo, con participación de expertos de ambas partes.
'Es un logro esperanzador, con lo difícil que resulta entablar un diálogo cuando se tiene la fantasía de que el otro quiere aniquilarnos', constata el presidente de la Asociación Mundial de Psicoterapia, el austriaco Alfred Pritz, que revela que los expertos habían estado a punto de rechazar la invitación por temor a que se tratara de propaganda para el lado rival. Y un psicólogo palestino no pudo salir de Gaza.
'Estamos aquí para preguntarnos cómo disolver el terror y transformarlo en diálogo, tratándose de dos pueblos que experimentan una realidad traumática saturada de violencia, con víctimas de horror acumulado', dice la psicóloga Hanna Biran, docente en la Universidad de Tel Aviv. Una de las causas de la guerra es, según Biran, el 'narcisimo cultural y social' que sobreestima la propia identidad e impide el reconocimiento del 'otro'.
Los palestinos resaltaron el problema de ser la parte débil de la guerra y no juzgaron los atentados suicidas . El psiquiatra Zaqoud Iyad, del Programa de Salud Mental de la comunidad de Gaza, destacó la necesidad de asistir a los socorristas que padecen secuelas indirectas de la violencia y habló de los traumas de la infancia.
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