Las plusvalías realizadas por la crisis argentina elevan un 14% el beneficio de las empresas en el primer trimestre

Las empresas no financieras han conseguido salvar el primer trimestre del año, pese a un contexto general de desaceleración económica. Según la Central de Balances del Banco de España, el beneficio neto aumentó un 14,5% frente al primer trimestre de 2001, cuando el pasado año se había registrado un recorte del 34,1%. Este cambio tan espectacular responde a que algunas grandes empresas han vendido participaciones para cubrir sus pérdidas en Argentina. Las plusvalías realizadas por algunas de ellas han más que compensado las dotaciones efectuadas por otras.

El resultado económico bruto refleja mejor la situación de fondos de las empresas y muestra una importante pérdida de impulso. Según la muestra, formada por 704 empresas no financieras que representan el 14% de la actividad, el aumento ha sido del 1,3% cuando el pasado año por las mismas fechas era del 2,8%. Si se eliminan del cómputo las empresas dedicadas al refino y la comercialización de carburantes, la tendencia se invierte. Con esta excepción, el resultado económico bruto aumentó un 4,9% este año frente a un 1,8% en el mismo trimestre del año anterior.

Estos resultados se producen en un clima de 'débil dinamismo' para las empresas analizadas, como consecuencia del clima de incertidumbre internacional, según el Banco de España. El valor de la producción aumentó un 2,2% en el primer trimestre de 2002, frente a un 3,8% en el conjunto de 2001. El sector exterior fue el que más acusó los efectos de la desaceleración. Las exportaciones pasaron de representar un 13% sobre el total de ventas de las empresas en 2001 a un 11,5% en 2002.

El comercio interior, por el contrario, fue la actividad más dinámica, con un crecimiento del 7,3% en el primer trimestre, aunque por debajo del 17,8% de todo el año 2001. La caída responde a que durante 2001, las empresas dedicadas a la comercialización de carburantes, se vieron muy favorecidas por el abaratamiento del petróleo. Si se excluye este sector, el aumento de la actividad en el comercio fue del 5,8%, dos puntos por debajo del año anterior.

Caída del empleo

Le sigue el sector de trasportes y comunicaciones con un crecimiento del 4,3%, debido sobre todo a la telefonía móvil. En la industria, por el contrario, se produjo un recorte del 1,8%, el quinto descenso trimestral consecutivo. En energía se produjo también una contracción del 1,7%, debido a la actividad de refino del petróleo y a la subida de precios. Las eléctricas, por el contrario, aumentaron su actividad un 6,3%, gracias a los aumentos de demanda y de tarifas.

El Banco de España señala que estos datos confirman 'la continuidad del proceso de desaceleración inciado en 2001, pese a algunos indicios de recuperación, como la ligera mejoría del contexto internacional, de la confianza empresarial y algunos indicadores industriales. El empleo refleja esa debilidad con un crecimiento de apenas el 0,6%, una décima menos que en 2001. La no destrucción de empleo es, según el Banco de España un dato 'favorable' ya que la muestra está escorada hacia grandes empresas en sectores como mucho peso. Aún así, el 44% de la muestra redujo plantilla en el primer trimestre, frente a un 38% el año anterior.

Otro aspecto que el Banco de España resalta como positivo para la competitividad de las empresas es la moderación de los salarios. En el primer trimestre del año la remuneración media aumentó un 2,9%, frente al 4% del primer trimestre de 2001.