_
_
_
_
_

Turquía busca el desquite ante Brasil

Los fallos arbitrales en contra en el partido de la primera fase, un acicate para el equipo otomano en su cita más importante

Es fácil olvidar que no sólo Corea ha llegado a las semifinales del Mundial gracias a dudosas decisiones arbitrales. Brasil, también. Un Brasil que, además, para los que insisten en la idea de que hay conspiraciones a favor de algunos equipos, ha recibido cierta ayuda de las eminencias de la FIFA. Esto, al menos, es lo que estará pensando buena parte de la población turca, cuya selección se enfrenta hoy a la brasileña por segunda vez desde que comenzó el torneo y motivada no sólo por la posibilidad, casi inconcebible hace un mes, de llegar a la final de Yokohama, el domingo, sino también por fuertes deseos de venganza.

El árbitro en el partido que disputaron los dos equipos en la fase preliminar, el surcoreano Kim Young-joo, concedió a Brasil un penalti que no lo era, expulsó a un turco cuando no debía y cada vez que le entró la duda pitó a favor de los suramericanos, que ganaron (2-1) y quedaron los primeros del grupo. Senol Gunes, el entrenador turco, no lo olvida. 'En el primer envite estuvimos a punto de empatar, pero el error de una persona hizo que Brasil ganara', recordó ayer en Saitama, la ciudad al norte de Tokio en la que hoy se jugará el partido. 'Hasta ahora no nos hemos beneficiado de ningún error arbitral. Brasil es un buen equipo, pero no mereció ganarnos. Espero que esto no se repita', afirmó.

Más información
Europa debe reflexionar
Selecciones:: Turquía
Gráfico animado:: Los 32 equipos del Mundial
El eterno cabeza de turco
"La historia de Brasil significa muchísima presión"
Los otros retos de Brasil
La pertinaz sequía de Hakan Sukur
La reconstrucción del fenómeno
'Al estilo Romario, pero con mi sello'
En directo:: Siga el partido minuto a minuto

Además del penalti inexistente, el turco Hakan Unsal, lesionado ahora, fue expulsado víctima de una simulación extraordinariamente crasa de Rivaldo, como todo el mundo pudo constatar por televisión. El comité disciplinario de la FIFA, pese al comentario del barcelonista de que aquella artimaña era 'parte del juego', le perdonó la suspensión a cambio de una multa equivalente a lo que gana cada mañana en el tiempo transcurrido entre levantarse de la cama y tomarse el primer café. Así que Rivaldo repitió la simulación, casi una copia de lo que hizo con Unsal, pero esta vez con Campbell como víctima, en el choque de los cuartos de final contra Inglaterra. Pero el árbitro en ese caso no estuvo tan atento. Ni expulsó a Campbell, ni amonestó o expulso a Rivaldo. La FIFA, que podría haber impuesto una sanción utilizando las imágenes televisivas, tampoco hizo nada. Y ahora ahí está Rivaldo, a punto de convertirse en uno de los goleadores más prolíficos en la historia de los Mundiales.

'Rivaldo es uno de los mejores jugadores, como Hakan Sukur o Mansiz', comentó Gunes, 'pero lo que hizo no es fair play. No fue correcto. No queremos que eso vuelva a producirse y mis jugadores no deben tomar esa actitud como ejemplo'. El mismo Rivaldo reconoció ayer que no le sorprendería que la venganza pueda ser utilizada por el entrenador turco para alentar a sus hombres.

Aunque no sólo son los turcos quienes tienen cuentas pendientes con Brasil. La próxima vez que la selección belga se mida a la brasileña se acordará de lo que pasó en este Mundial en los octavos de final. Brasil quizás no habría pasado a los cuartos contra Inglaterra si no hubiera sido por una ayuda arbitral similar a la que benefició a Corea en el partido frente a España.

No se trató de un gol de oro, pero en la primera parte de aquel encuentro el árbitro jamaicano anuló un gol de cabeza del capitán belga, Wilmots, tan impecablemente legal como el tanto de Baraja ante Corea. Ese remate certero habría adelantado en el marcador a una Bélgica que hizo sufrir a Brasil y quién sabe lo que hubiese sucedido finalmente si el árbitro hubiera concedido el gol en vez de invalidarlo.

Ronaldo, entre Kaká y Edmilson, ensaya el control del balón con la cabeza.
Ronaldo, entre Kaká y Edmilson, ensaya el control del balón con la cabeza.EFE

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_