'Ya no faltan hoteles en la costa'
Pregunta. ¿Siempre trabajó en hoteles?
Respuesta. Toda la vida. A los 14 años ya estaba en el Reina Victoria de Valencia, y hace unos años caí en una empresa, NH, que abrió un hotel en la avenida del Puerto por el que nadie daba un duro y ahora hay siete en Valencia. Eso fue una revolución por nuestro nuevo concepto de la hostelería.
P. ¿Qué es lo que singulariza a los hoteles NH del resto?
R. Son más modernos y aplicamos otra mentalidad al negocio: no somos una empresa jerarquizada y tenemos un organigrama muy plano. Aunque ahora nos han copiado tanto que parece que hemos perdido un poco de capacidad de innovación. Pero estás obligado a ser el primero, porque ser el segundo no vale.
P. En Argentina, donde ha vivido hasta ahora, no es el mejor momento para abrir un hotel.
R. Es bastante difícil. Además, las empresas españolas están en el punto de mira debido a la demagogia que se hace diciendo que están haciendo el agosto. Nosotros llegamos con dinero genuino y pagamos los impuestos, cosa que no hacen todos los argentinos.
P. ¿No ha resultado ser Eldorado para las empresas españolas?
R. Argentina es un país más rico que España, pero hay mucha corrupción a todos los niveles. Es lo más parecido a Cuba: el argentino no sabe que se ha metido en el mundo del capitalismo y prefiere el pleno empleo aunque no sea productivo. Y las reglas del juego, para bien o para mal, no son ésas.
P. ¿Por qué se come tan mal en los hoteles?
R. En los hoteles que no son NH se come bastante mal, entre otras cosas porque los clientes son distintos y se tiende a tener una cocina sin personalidad llamada internacional. Nosotros tenemos una gran preocupación por la gastronomía porque estamos convencidos de que la cocina no puede renunciar a tener una especialidad. En ese sentido, ahora está trabajando para nosotros Ferran Adrià, del restaurante El Bulli de Roses, que es uno de los seis mejores cocineros del mundo.
P. ¿Todavía queda gente que viva en los hoteles, como Al Capone?
R. Prácticamente no. De vez en cuando hay un entrenador o un futbolista que lo hace mientras le buscan una casa. En un hotel se está muy bien pero no tienes la intimidad que tienes en una casa. Yo prefiero una casa a un hotel.
P. ¿En la Comunidad Valenciana deberíamos tener más hoteles y menos apartamentos?
R. Este año se está viendo que la ocupación hotelera no es plena. El Año Nuevo no fue muy bueno, la Semana Santa tampoco y parece que el verano no va a ser el mejor porque hay algo de recesión en los mercados alemán e inglés. O sea que ya no faltan hoteles en la costa. Aparte de que hay sitios en los que no debieran hacerse más hoteles porque están saturadas y a la larga el litoral valenciano tiene un problema de agua de difícil solución. Ya tenemos una industria y no hay que olvidar que el turismo es contaminante.
P. ¿Valencia tiene suficientes hoteles?
R. Hoy en día le sobran. Construir un hotel se ha convertido en una cuestión inmobiliaria.
P. ¿El turismo cultural puede ser una alternativa a un turismo de negocios que nunca termina de cuajar?
R. Una de las cosas sorprendentes es que los fines de semana los hoteles de Valencia se llenan de catalanes que vienen al IVAM. Pero hace falta una promoción específica, porque de momento ha traído más turismo la ruta del bakalao que el IVAM. A los responsables de turismo hay que pedirles más.
EN DOS TRAZOS
Este valenciano 'y grauero' ha pasado 36 de sus 50 años trabajando en hoteles, y lleva abiertos unos 30. Fue el encargado de la expasión de NH en la Comunidad Valenciana, en la que abrió 13 establecimientos, y ahora, desde Buenos Aires (Argentina) o Madrid, cumple la misma misión para Suramérica. Vive en un avión, pero desde cualquier parte mantiene firme la fidelidad al Levante UD a través de Internet, aunque es consiciente de que los seguidores de este equipo son tan minoritarios que corren el riesgo del exterminio.
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