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Huelga de los médicos de los ocho hospitales públicos catalanes

Los facultativos consideran abusivo que durante las guardias trabajen 24 horas seguidas

Clara Blanchar

Los médicos de los ocho hospitales del Instituto Catalán de la Salud (ICS) hicieron ayer huelga en demanda de un estatuto marco que regule la profesión médica y de mejoras salariales y laborales. El paro tuvo un seguimiento del 75%, según el Sindicato de Médicos de Cataluña, mientras que el ICS cifró la incidencia en el 36%. La huelga provocó quejas entre los pacientes, ya que sus visitas no fueron anuladas ni se les avisó de la huelga.

La convocatoria del Sindicato de Médicos de Cataluña (SMC) afectó a 2.200 médicos de los ocho centros sanitarios públicos catalanes: los hospitales de Vall d'Hebron, en Barcelona; Príncipes de España de Bellvitge, en L'Hospitalet; Germans Trias i Pujol, en Badalona; Arnau de Vilanova, en Lleida; Joan XXIII, en Tarragona; Verge de la Cinta, en Tortosa; Josep Trueta, en Girona, y el hospital de Viladecans.

El hospital de Bellvitge fue el más afectado por la huelga, con un seguimiento del 98% según el SMC y del 72% según el ICS. En el resto de los hospitales, los datos del seguimiento son muy dispares. Según el sindicato rondan el 70%, mientras que el ICS considera que la incidencia osciló entre el 46% del hospital de Can Ruti de Badalona y el 10% del hospital de Tortosa.

A pesar de que el pasado martes el sindicato y Sanidad consensuaron los servicios mínimos, el ICS anunció que no anularía la actividad asistencial programada. Esta circunstancia provocó ayer el desconcierto entre los pacientes, que al no ser avisados de la huelga se encontraron con las consultas externas cerradas y las operaciones no urgentes anuladas. La Coordinadora de Usuarios de la Salud denunció el 'malestar' provocado entre los usuarios al no ser avisados con antelación ni por la Administración ni por los sindicatos, y transmitió su queja al ICS. Según una portavoz de la coordinadora de usuarios, Sanidad 'se disculpó' y argumentó que 'no había desprogramado las visitas por considerar que se podría atenderlas con los médicos que no secundaran la huelga'.

El motivo de fondo de la huelga de ayer es el temor de los médicos al contenido de de la reforma del estatuto de la profesión sanitaria que está elaborando el Ministerio de Sanidad. El sindicato lamenta, por ejemplo, que 'en el texto del borrador no se menciona ni una vez la palabra médico'.

Actualmente, la profesión médica se rige por un régimen jurídico específico regulado en 1966. La Ley General de la Sanidad, de 1986, prevé el desarrollo de un estatuto marco específico para la profesión médica. Los sucesivos gobiernos han preparado distintos borradores, pero ninguno de ellos ha llegado a prosperar. El Ministerio de Sanidad prepara actualmente un nuevo marco estatutario general para todas las profesiones que intervienen en el sistema sanitario. Ante este borrador de Sanidad, los médicos se ven amenazados y temen que la nueva normativa les haga perder su especificidad.

Tres puntos clave

Los médicos exigen un estatuto marco específico en la línea de lo establecido en la Ley de Sanidad promulgada bajo Gobierno socialista. Según el presidente del Sindicato de Médicos de Cataluña, Patricio Martínez, la normativa debería recoger 'tres puntos irrenunciables' para adaptar la situación de los facultativos a las nuevas necesidades y a la normativa europea.

Estos tres puntos son la regulación de la jornada laboral y los periodos de descanso, que se establezca un nuevo modelo de carrera profesional con un sistema de promoción que tenga en cuenta los méritos de cada facultativo y el esfuerzo que realiza en formación continuada y, por último, que se retribuya a los profesionales de acuerdo con la responsabilidad y la carga asistencial que soportan.

Los médicos de la plantilla del ICS cobran una media anual de 38.000 euros brutos. Así, un médico adjunto cobra aproximadamente 2.714 euros brutos mensuales, y el salario se incrementa en 180 euros en cada categoría superior. Según el Sindicato de Médicos, estos sueldos son los más bajos de Europa después de los de Grecia y representan la mitad de lo que cobran los facultativos italianos y un tercio de la remuneración de los británicos.

Sobre la jornada laboral y los periodos de descanso, los médicos catalanes reivindican que las horas de guardia se remuneren de la misma forma que las del resto de la jornada y pretenden disponer de un día entero de descanso tras las guardias. Actualmente, las guardias se realizan entre dos jornadas laborales sin descanso, de forma que los médicos permanecen trabajando durante más de 24 horas seguidas.

La directora gerente del Instituto Catalán de la Salud, Alicia Granados, afirmó ayer que la huelga de los médicos se produce cuando 'las negociaciones están abiertas y se desarrollan según el calendario previsto'. Granados calificó la convocatoria de huelga de 'original'. 'Normalmente las huelgas se producen tras la ruptura de negociaciones', dijo Granados.

La responsable del ICS explicó que el organismo se encuentra en un proceso de modernización 'complejo', que se concretará en un plan de empresa para el periodo 2002-2005 en el que ya se recogen algunas de las reivindicaciones de los médicos. Granados explicó que el ICS reconoce la necesidad de revisar los salarios de los facultativos y añadió que el plan prevé 'revisar el modelo retributivo' y un sistema de promoción, incentivación y carrera profesional 'adecuado a la realidad asistencial actual'.

Respecto a las reivindicaciones de los médicos del ICS sobre el estatuto específico que debe regir su profesión y a la regulación de la jornada laboral, Granados adujo que se trata de 'cuestiones que no son competencia de la Generalitat', sino que las dicta el Gobierno español a través del Ministerio de Sanidad.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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