Muñoz Rojas gana el XI Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana

El poeta José Antonio Muñoz Rojas (Antequera, 1909) obtuvo ayer el XI Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, dotado con 36.000 euros por la Universidad de Salamanca y Patrimonio Nacional. El jurado afirma en el fallo que la obra de Muñoz Rojas resume y refleja la historia completa de la poesía española del siglo XX. 'Yo me he dedicado toda la vida a la literatura, aunque nunca profesionalmente. Quizás por eso no se me ocurre pensar que me pueden dar premios', declaró ayer el escritor.

'No me lo podía esperar y me ha encantado, sobre todo por el nombre que lleva', dijo ayer en Sevilla José Antonio Muñoz Rojas, de 92 años, después de conocer que había sido galardonado con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana. El escritor acababa de llegar de Antequera, en compañía de su mujer, para celebrar el cumpleaños de su hijo Rafael.

'¿Trabajar? Yo no he trabajado nunca. Escribir es un placer, algo a lo que no renuncio', comentó el poeta malagueño, quien en 1998 obtuvo el Premio Nacional de Poesía por su libro Objetos perdidos.

El escritor publicó el año pasado Olvidos, 70 años después de Ardiente jinete, su primera obra. Muñoz Rojas, cuyo nombre fue propuesto por miembros del jurado, consiguió el premio 'por mayoría, en apretada votación' con los dos finalistas, la portuguesa Sofía de Mello y José Emilio Pacheco, según indicó el rector salmantino, Ignacio Berdugo.

Entre los 87 candidatos figuraban también Carlos Bousoño, Francisco Brines, José Manuel Caballero Bonald, Ernesto Cardenal, Arnaldo Antunes, Antonio Gamoneda y Leopoldo de Luis.

Por primera vez, el jurado, en el que figuraban, entre otros, Carlos Fuentes y José Saramago, falló el premio en la Universidad de Salamanca, donde también tendrá lugar la entrega del galardón en el mes de noviembre por parte de la reina Sofía.

El portavoz del jurado, Enrique Andrés Ruiz, destacó que Muñoz Rojas 'es un poeta de sorprendente vitalidad, con un lenguaje fresco y flexible' a lo largo de su larga trayectoria creativa y que no ha desaparecido en sus dos últimos libros, Objetos perdidos y Olvidos. El portavoz destacó, entre las obras del galardonado, 'un libro especialmente querido por los lectores, Cosas del campo (1946), prosas poéticas inscritas dentro de una tradición no frecuente pero sí destacada, perfilada entre el Platero, de Juan Ramón Jiménez, y Ocnos, de Luis Cernuda'; Lugares del corazón y Oscuridad adentro, aparecidos en los años sesenta, 'títulos que entroncan con sus preocupaciones religiosas y la perplejidad filosófica que sintió tras la lectura de T. S. Eliot, posición que luego enriqueció con otros autores de poesía metafísica inglesa'.

Muñoz Rojas divide su tiempo entre las tareas de su finca de olivos en Antequera, La Casería del Conde, y Madrid, ciudad en la que pasa una semana al mes. 'Mi padre tiene una salud excelente. Él mismo se ocupa de dirigirlo todo en el campo y, hasta los 80 años, montó cada día a caballo', comentó su hijo Rafael.