La humedad amenaza la colegiata de Santillana del Mar

La colegiata románica de Santillana del Mar se encuentra enferma. La piedra arenisca utilizada en su construcción hace más de 800 años sufre severas exfoliaciones, grietas y desconchados principalmente en la fachada, el claustro y los capiteles. Un informe llevado a cabo por científicos del CSIC preparado para remitir al Ministerio de Cultura aconseja una intervención en el histórico edificio que visitan al año cerca de un millón de personas.

El sombrío diagnóstico de la enfermedad de la piedra se atribuye principalmente al muy alto índice de humedad que afecta a la sillería y a la falta de los cuidados requeridos para la conservación. No se trata de que la colegiata pueda venirse abajo, pero sí de la visible descomposición de la piedra, que posiblemente precise un tratamiento integral.

El mal fue revelado por primera vez hace 15 años cuando un equipo de la Facultad de Geología de la Universidad de Oviedo redactó un informe de medio centenar de folios y advirtió de la elevada porosidad que sufrían los capiteles, muy afectados por la humedad ambiental, y otros focos generados por el ruinoso estado del tejado, así como el empapado de la unión y parte interna de los sillares.

La acción directa de la lluvia que puede hoy arrastrar componentes químicos nocivos para el mantenimiento del edificio fue ya mencionada entonces. El estudio quedó en poder de la Dirección General de Bellas Artes, a la que ahora se enviarán las nuevas precisiones sobre la situación, y que confirmará el diagnóstico avanzado en 1987. Acaso la colegiata, propiedad del Obispado, haya sufrido en el último siglo más que en los siete y medio anteriores debido a agentes medioambientales y a la incontenible humedad que soporta.

Los autores del informe, Mónica Álvarez y Rafael Fort, sugieren llevar a cabo nuevos estudios específicos. Han sido las asociaciones Plaza Porticada y Cantabria Nuestra las que se adelantaron a requerir la presencia de nuevos expertos que confirmaran la necesidad de atender a la conservación de la colegiata.