Los parques eólicos navarros matan 59 veces más aves que lo admitido
El grupo ecologista Gurelur denuncia la ocultación de datos
La mortandad de aves que generan los parques eólicos instalados en Navarra es al menos 59 veces mayor que la reconocida por los informes públicos emitidos por el Gobierno de foral, según la denuncia formulada por uno de los grupos ecologistas más activos de la comunidad navarra, Gurelur. Sus datos apuntan a que en el bienio 2000-2001 murieron por esta causa un total de 8.406 aves, y no 141 animales, tal y como indicó en su momento el departamento navarro de Medio Ambiente.
Esta es la estimación realizada por los responsables de la asociación, basada en los datos de un informe oficial elaborado por un especialista en biología por encargo del departamento medioambiental del Gobierno de Navarra que contradice las informaciones oficiales.
En julio de 2001 el consejero navarro Javier Marcotegui presentó los resultados del estudio sobre el efecto de los parques eólicos navarros en la fauna circundante. Según las cifras aportadas entonces, de las 95.234 aves que pasaron por las zonas investigadas -diez de los principales parques eólicos de la comunidad- murieron 138 aves y 3 murciélagos. Las conclusiones evidenciaban que sólo una de cada mil aves moría por impactos contra los aerogeneradores.
El Gobierno navarro anunció entonces, no obstante, que pensaba adoptar medidas para minimizar esa tasa de mortandad de las aves, dada la profusión de este tipo de instalaciones que se está produciendo en el territorio navarro.
Antonio Munilla, secretario de Gurelur, ha dado a conocer ahora otros datos de aquel informe oficial de Medio Ambiente, efectuado entre marzo de 2000 y marzo de 2001, que no se hicieron públicos entonces.
Cálculos dispares
Aunque el estudio no calculó las cifras globales de mortandad en toda la geografía foral 'creemos que con la clara intención de no escandalizar' subraya Munilla, Gurelur ha extrapolado los datos estadísticos sí incluidos en el muestreo mediante la fórmula denominada de Winkelman y el resultado es que anualmente mueren 8.406 aves sólo en el entorno de las diez centrales de energía eólica estudiadas en la comunidad foral navarra, 7.185 paseriformes, 749 murciélagos y 472 rapaces, en su mayoría buitres leonados.
'El Gobierno no dio en ningún momento las cifras totales de muertes estimadas', afirma Munilla, 'y ocultó las conclusiones relativas a la falta de estudios previos sobre el uso del espacio por parte de aves y murciélagos'. Tampoco hizo público, según denuncia el secretario de Gurelur, 'el riesgo de mortandad detectado en especies en peligro de extinción como el águila perdicera y el quebrantahuesos y las graves afecciones que estas instalaciones están ocasionando en la fauna migratoria'.
Gurelur ha anunciado su decisión de interponer denuncias contra los responsables forales de Medio Ambiente y la presentación de una queja ante la Unión Europea. Porque esta asociación defiende que algunos de los parques existentes son incompatibles con el mantenimiento de la fauna protegida del entorno, especialmente, el parque de la sierra de Salajones, cerca de Sangüesa, con una elevada mortandad anual de rapaces, buitres leonados y murciélagos.
Aspas de colores para pájaros
El Gobierno de Navarra no ha rebatido los porcentajes apuntados en el informe oficial esgrimido por Gurelur, pero insiste en que el estudio sobre la afección de los molinos de viento y sus infraestructuras asociadas sobre la avifauna que Navarra realiza es pionero en España y está dando resultados preventivos. Esta misma semana el departamento foral de Medio Ambiente anunció que el plan de seguimiento se extenderá a los nuevos parques eólicos del sur de la comunidad y dio a conocer la obligación de que en los tres últimos parques autorizados -Vedadillo y Moncayuelo, en Falces, y Txutxo (Ujué)-, la distancia mínima entre aerogeneradores deberá ser de 120 metros para permitir la permeabilidad de paso de las aves. Se han suprimido algunas palas y se ha obligado a enterrar las líneas eléctricas, que también son causa de mortandad. Además, con carácter general, el Gobierno foral reitera que se realizarán paradas técnicas temporales en molinos concretos y según las condiciones climatológicas para evitar situaciones de riesgo, una medida ante la que la empresa promotora de la mayor parte de los parques, Energía Hidroeléctrica de Navarra (EHN), ha mostrado buena disposición. También se estudia la necesidad de pintar las aspas de determinados molinos para hacerlas más visibles y se ajusta el diseño de los parques incorporando criterios excluyentes vinculados a hábitats de interés comunitarios, zonas protegidas, áreas de campeo de especies protegidas, suelos de alta productividad o presencia de cañadas, Camino de Santiago y otros.
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