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Los daños en playas por temporales costaron 50,7 millones desde noviembre

Hallada la segunda víctima de la tormenta mientras se busca a un desaparecido en Euskadi

Cesan las lluvias, el mar se aplaca y llega el recuento de los daños. El temporal de esta semana en la costa mediterránea ha dejado dos muertos, en Tarragona y Valencia, y un pescador desaparecido tras caer al mar en Euskadi, y cuantiosos daños en infraestructuras que ayer comenzaron a valorar las distintas administraciones. En Cataluña decenas de playas quedaron arrasadas y sólo en la ciudad de Barcelona las olas se llevaron 40.000 metros cúbicos de arena.

El director general de Costas, José Trigueros, aseguró ayer que el Ministerio de Medio Ambiente tendrá lista la próxima semana una evaluación de los daños en el litoral mediterráneo y prometió que actuará 'con celeridad para que las playas estén en unas condiciones más que aceptables' este verano.

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Desde que noviembre pasado, cuando comenzaron los temporales, hasta el 18 de marzo ese ministerio invirtió unos 50,7 millones de euros en toda la costa española para reparar los desperfectos del embate del mar, recordó Trigueros. De ellos, nueve millones corresponden a Cataluña (seis en la provincia de Barcelona); 13 en la Comunidad Valenciana; en Baleares 13,7 millones; en Andalucía 8,4 (7,4 millones para la provincia de Málaga), en Canarias (Tenerife) 3,8 millones y en Galicia 2 millones de euros.

Con todo, el portavoz de CiU en el Congreso, Xavier Trias, presentó ayer una proposición no de ley en la que se insta al Gobierno a adoptar medidas urgentes para reparar los daños causados por el temporal, si bien no solicita ninguna cifra concreta.

Los nacionalistas catalanes aducen que este nuevo temporal ha venido a aumentar los perjuicios derivados de los destrozos que provocaron en la misma zona otros temporales en invierno que estaban todavía en fase de recuperación.

Problemas para el turismo

Trias advirtió de que 'hay una situación muy grave y urgente porque el verano se viene encima y no se pueden tener las playas como han quedado' porque el perjuicio a la economía de la zona sería grave.

El presidente de la Generalitat Valenciana, Eduardo Zaplana, indicó que esa comunidad está 'preparada para soportar' temporales como el de los últimos días y apuntó que estas situaciones habrían sido 'terroríficas' en años anteriores. Respecto a la situación de las playas, indicó que 'se recuperan, ya que por muy duro que haya sido el temporal las playas se regeneran solas, salvo en aquellas circunstancias donde la arena es artificial'.

Respecto a las pérdidas humanas, agentes de la Guardia Civil encontraron a primera hora de ayer el cuerpo sin vida del hombre de 66 años que fue arrastrado el miércoles por la corriente del río Magro, a su paso por el municipio de Carlet (Valencia).

La víctima salió a pasear en bicicleta y un matrimonio que se cruzó en su recorrido vio como el hombre caía al agua en una zona conocida como Corral Blanc y era arrastrado por la fuerte corriente que había sobrepasado el cauce.

Los equipos de rescate de la Cruz Roja y Salvamento Marítimo y efectivos de la Brigada Móvil de la Ertzaintza intentaron ayer sin éxito encontrar al pescador que cayó al mar en la noche del miércoles en Mutriku (Guipúzcoa). La víctima es un vecino de Portugalete de 44 años cuya identidad corresponde a las iniciales M. A. G. N., quien desapareció cuando intentaba recoger una caña en un espigón cercano a la playa de Ondarbeltz. Los servicios de rescate rastrearon el tramo de la costa comprendido entre Deba e Itziar pese a la mala situación de la mar. Durante las labores de búsqueda sólo se encontraron la caña y la linterna que utilizó el pescador.

También al temporal se achaca que una ballena quedase encallada en el puerto de Barcelona.Las autoridades portuarias tardaron dos horas en retirar con dos grúas el animal, de unos 15 metros de largo y 30 toneladas de peso.

Según el coordinador del Centro de Recuperación de Animales Marinos de Cataluña, Ángel Balmaseda, la ballena pudo haber muerto en alta mar y quedar encallada en el puerto debido a la tormenta.

La ballena varada en el puerto de Barcelona, en un remolque tras ser retirada del mar.
La ballena varada en el puerto de Barcelona, en un remolque tras ser retirada del mar.ANDRÉS MORENO

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