Un muerto y un desaparecido por el temporal en la costa mediterránea

El temporal de viento y lluvia que bate estos días el litoral mediterráneo provocó ayer la muerte de una persona en Tarragona y la desaparición de otra en Valencia, además de barrer 40.000 metros cúbicos de arena de las playas de Barcelona, derrumbar la escalinata de la catedral de la ciudad tarraconense de Tortosa, Santa María de la Cinta (siglos XII y XIII) y dejar sin agua potable a 50.000 personas en Alicante. La víctima mortal del temporal se produjo en las comarcas del sur de Tarragona, donde un hombre de 40 años cuya identidad no fue facilitada, falleció en Deltebre, después de que el coche que conducía se saliera de la carretera mientras llovía intensamente y cayera en un canal.

Efectivos de la Guardia Civil y la Policía Local de Carlet, en la comarca de La Ribera Alta (Valencia), iniciaron pasadas las tarde de ayer la búsqueda de una persona de 66 años desaparecida cuando iba en bicicleta por la vereda del río Magro y que, según fuentes de la policía local, podría haber caído al agua tras sufrir un accidente a consecuencia del estado en el que han quedado los caminos por el temporal en la zona. El desaparecido, del que al cierre de esta edición no se facilitó la identidad, es un vecino de Carlet que habitualmente recorre el trayecto en el que ayer desapareció.

En la Comunidad Valenciana el temporal de los últimos tres días, el más fuerte en primavera en los últimos 50 años, ha dejado más agua que las famosas trombas de otoño en esa comunidad.

Las comarcas del sur de Valencia y norte de Alicante, especialmente La Safor y La Marina, registraron precipitaciones que alcanzaron los 550 litros por metro cuadrado, mientras que en Cataluña se registraron hasta 150 litros por metros cuadrado. Durante las 72 horas de lluvias continuas, numerosos municipios, como Carcaixent, Calp y Dènia, dejaron sin agua potable a unas 50.000 personas. Los cortes de fluido eléctrico provocaron la interrupción durante varias horas de la conexión ferroviaria desde Valencia a Alzira y Gandia por una avería en la subestación de Silla (Valencia).

También de forma preventiva, según fuentes de la Confederación Hidrográfica del Júcar, los embalses del Regajo y Ulldecona y Onda (Castellón), y de Beniarrés (Alicante) abrieron los aliviaderos en la noche del martes ante la posible superación de los nivel máximos acumulación. Los bomberos realizaron entre el lunes y la tarde de ayer más de 200 salidas de emergencia y vecinos de algunas urbanizaciones fueron evacuados en la noche del martes si bien regresaron ayer a sus domicilios.