La UE prepara un convenio de extradición con EE UU que excluye la pena de muerte
La Unión Europea ya está lista para negociar su primer convenio de cooperación judicial y de extradición con Estados Unidos. Los ministros europeos de Justicia aprobaron ayer el mandato que permitirá a la presidencia de la UE y a la Comisión Europea sentarse a discutir con la Administración de EE UU la creación de un marco legal transatlántico que permita reforzar los medios bilaterales existentes en la lucha contra el terrorismo y el crimen organizado. Pero la UE deja claro de antemano que la extradición sólo se producirá cuando haya garantías de que los tribunales norteamericanos no condenarán al reo a la pena de muerte.
El mandato que se acordó para negociar con EE UU el convenio de asistencia penal y de extradición se sustenta sobre dos pilares: por un lado, deberá ser 'absolutamente respetuoso' con las constituciones y con los ordenamientos jurídicos de las partes y, por otro, se basa en los acuerdos bilaterales existentes entre algunos Estados miembros y EE UU. De firmarse, este convenio se convertirá en el primer tratado de cooperación judicial entre la UE y EE UU, lo que según el ministro español de Justicia y presidente de turno en la UE, Ángel Acebes, 'dará un valor añadido a los acuerdos bilaterales actuales'. 'Seremos muy escrupulosos con esos principios', añadió el comisario europeo Antonio Vitorino.
El objetivo, en definitiva, es el de crear un marco legal común transatlántico que permita combatir los delitos más graves, como el terrorismo, el crimen organizado y el financiero. La Administración norteamericana lanzó tras los atentados del 11 de septiembre duras críticas contra las trabas legales que desde algunos países de la UE se le ponían para extraditar sospechosos y bloquear sus cuentas. Ahora se trata de superar estos problemas y permitir a las autoridades judiciales europeas y norteamericanas intercambiar información con rapidez suficiente como para seguir la pista de las transacciones financieras de los grandes grupos criminales y decidir sin dilación el embargo y el bloqueo de cuentas. 'Así lucharemos contra la propia financiación del crimen organizado', señaló Acebes.
Además, se pretende agilizar los procedimientos en la cooperación en el ámbito judicial. Para ello se simplificará el papeleo, se mejorarán los sistemas de transmisión de datos y se crearán puntos de contacto únicos entre las autoridades de los Estados miembros -articulada por Eurojust- y las norteamericanas. Otro elemento importante es el desarrollar las posibilidades legales para crear equipos conjuntos de investigación que permitan la persecución del delito. Además, se negociará el recurso a la videoconferencia para interrogar a los testigos y evitar así los desplazamientos.
