La Ertzaintza detiene en Bilbao a seis supuestos colaboradores del antiguo 'comando Vizcaya'

Efectivos de la Ertzaintza (policía vasca) detuvieron ayer en Bilbao a seis personas acusadas de colaborar con el antiguo comando Vizcaya de ETA. Los arrestos, dirigidos por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, comenzaron a las seis de la mañana en el barrio bilbaíno de Deusto. Los agentes se incautaron en los inmuebles registrados de diversa documentación, pero no hallaron armas ni explosivos. Los detenidos, según la policía y el grupo de apoyo a presos Askatasuna, son Juan Maidagan Hernández, Iñaki Beaskoetxea Romillo, Aitor García Lertxundi, Mikel Juregi Aguirrezabala, Cristina Monge Ormaetxea y María Angeles Pastor. Esta última fue detenida hacia las diez de la mañana en su domicilio de la calle de Artekale, en el Casco Viejo de Bilbao, de donde los agentes se llevaron varias cajas con documentación.

Jauregi trabaja en la publicación próxima a la izquierda independentista, Kale Gorria. Sus compañeros emitieron un comunicado en el que denunciaban la 'vulneración para con su persona y para con el resto de las personas detenidas de la presunción de inocencia al filtrarse informaciones inculpatorias'.

La policía registró inmuebles en dos calles del barrio bilbaíno de Deusto, de donde sacaron varias cajas con documentación. Otro de los registros tuvo lugar en una lonja situada junto a la herriko taberna (bar-sede de Batasuna) de la localidad de Zamudio. Askatasuna y la policía confirmaron que Juan Maidagan fue llevado hasta Zamudio para estar presente en la inspección.

El consejero vasco de Interior, Javier Balza, dijo que los detenidos están acusados de aportar 'infraestructura, apoyo y ayuda a los comandos en sus movimientos'. Fuentes relacionadas con la investigación indicaron que tanto Maidagan como Beaskoetxea están acusados de haber ayudado a huir a Francia en 1997 a Harriet Iragi y Jon Igor Solana Matarrán, miembros del comando Andalucía, ambos en prisión. Estos dos terroristas se incorporaron en el año 2000 al comando Andalucía, donde participaron en los asesinatos el concejal del PP de Málaga Martín Carpena, del fiscal Luis Portero y del coronel médico Muñoz Cariñanos.

Balza, que explicó pormenores de la operación en los pasillos de la Cámara vasca, desvinculó las detenciones de ayer de las investigaciones centradas en desarticular el actual complejo Vizcaya. A este grupo se atribuyen los últimos atentados en esta provincia, entre ellos el asesinato a finales de 2001 del magistrado José María Lidón y los atentados contra dos ertzainas y los socialistas Eduardo Madina y Esther Cabezudo.

'No es una investigación vinculada al actual comando Vizcaya', dijo al tiempo que aseguraba que no existen pruebas de su colaboración con el actual grupo. Los arrestados llevaban, según el responsable vasco de Interior, muchos años colaborando directamente con ETA.

Con todo, Balza no descartó que la investigación de los documentos hallados termine desvelando lazos de conexión. La operación continuaba ayer abierta. 'Es posible que se produzca alguna detención más', dijo. También afirmó que quedaba por registrar algún otro inmueble. A los seis detenidos no les fueron ocupadas armas ni explosivos, pero sí abundante documentación que comenzó a analizarse ayer mismo.

Balza explicó que la investigación que condujo a la operación policial se inició hace tiempo -no precisó el momento concreto- y que la decisión de actuar se adoptó una vez constatada la existencia de pruebas concretas de colaboración con ETA.