El Foro Social reclama instrumentos para 'gobernar la globalización'
El Foro Social de Barcelona -una plataforma moderada que agrupa a 45 entidades críticas con la 'globalización neoliberal'- presentó ayer sus conclusiones alternativas a la cumbre oficial en un acto solemne en el paraninfo de la Universidad de Barcelona (UB). Los portavoces de esta plataforma dejaron claro que, pese a formar parte del difuso movimiento conocido genéricamente como antiglobalización, no están en contra de la Unión Europea (UE) ni de la globalización, sino que básicamente reclaman instrumentos para gobernarla.
Entre la batería de propuestas que el foro lanzó ayer tras más de dos meses de debate destacan la exigencia de democratización de Naciones Unidas, aumentar los recursos y las competencias del Tribunal Penal Internacional, la potenciación de los servicios públicos, imponer un código ético a las empresas multinacionales e impulsar los presupuestos participativos a partir de un modelo inspirado en la experiencia de Porto Alegre (Brasil).
Más de 800 personas -entre ellas destacados representantes de toda la izquierda parlamentaria y del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona- abarrotaron el paraninfo de la universidad. Las intervenciones del economista Arcadi Oliveras, del escritor Manuel Vázquez Montalbán y del rector de la propia UB, Joan Tugores, quien también consideró urgente corregir el actual proceso de globalización, cerraron el acto.
El cariz institucional y posibilista del foro ha encrespado a otros sectores más radicales del movimiento antiglobalización, y éstos dieron ayer varias muestras de su enojo.
Una veintena de jóvenes interrumpieron durante unos minutos la lectura de conclusiones y entraron en el paraninfo dirigiendo gritos de 'fascistas' a los asistentes. Por la mañana, una veintena de jóvenes radicales increpó a Bernard Cassen, fundador de la organización internacional Attac y uno de los iconos internacionales de los antiglobalización, al considerarlo demasiado moderado e 'hipócrita'.
