La 'compensación' evolutiva se manifiesta en los atletas

Los animales más rápidos se cansan en las largas distancias, los más corpulentos y fuertes tienden a ser más lentos de movimientos. Estas compensaciones, especialmente en el rendimiento físico, parecen obvias, pero no hay muchas pruebas contundentes, afirman los científicos en el último número de la revista Nature. Para ahondar en la cuestión, un grupo de investigadores han buscado, y encontrado, una manifestación de estas compensaciones en los atletas de decatlón.

Robbie Wilson, de la Universidad de Amberes (Bélgica) y sus colegas, han analizado estadísticamente las marcas de deportistas de elite de decatlón y han visto que los mejores atletas en una prueba fallan notoriamente en la antagonista. 'Las compensaciones pueden imponer restricciones importantes en la evolución del rendimiento físico en humanos y en otros vertebrados', sugieren.

Los investigadores han compilado datos de las actuaciones de 600 atletas de decatlón de nivel internacional. Al analizar la información y establecer las comparaciones 'resultan evidentes las compensaciones entre ciertas características', afirman. Por ejemplo, los buenos sprinters son relativamente flojos en la carrera de 1.500 metros, pero son eficaces en salto de longitud, los 400 metros y los 110 vallas.

También se aprecian correlaciones negativas, por ejemplo, entre lanzamiento de peso (que exige potencia explosiva en las extremidades superiores) y los 1.500 metros (que depende de la resistencia de las extremidades inferiores).

Los resultados del análisis parecen apoyar la idea de compensaciones debidas a requisitos anatómicos en conflicto (como peso corporal relativo y proporción de las extremidades) y requisitos del tipo de fibra muscular. 'Las correlaciones negativas', señalan, 'pueden reflejar también diferencias en el entrenamiento, por ejemplo, si los atletas se especializan en una disciplina en detrimento de las otras'. Los investigadores puntualizan que sus resultados deben ser contrastados con análisis genéticos, de ratones e insectos, por ejemplo.