Josep Grau asegura que la peste porcina en Osona aún no ha tocado techo
Confirmado el undécimo foco de la epidemia en Vic
El consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Generalitat, Josep Grau, aseguró ayer en Bot (Terra Alta) que el brote de peste porcina clásica (PCC) declarado durante las últimas semanas en la comarca de Osona ocasionará un 'goteo constante durante una temporada porque la explosión máxima aún no ha llegado'. Grau hizo estas declaraciones tras anunciar que los análisis remitidos por el laboratorio de Valdeolmos (Madrid) confirmaron la existencia de un nuevo foco, el undécimo, en una granja de Vic.
El consejero Grau comparó ayer el número de focos declarados hasta el momento en Osona con los 19 de Lleida y los 470 del año 2000 en Alemania, 'el principal productor de Europa', dijo.
Grau anunció el inminente sacrificio de todos los cerdos en el radio de 1,5 kilómetros de la granja afectada. En este sentido, se reafirmó en la decisión de ampliar la distancia que delimita la zona afectada para el sacrificio: 'Mientras el único instrumento que tengamos para eliminar la enfermedad sea el sacrificio, sólo podemos actuar con vaciados', señaló.
El consejero lamentó también que la decisión del Comité de Gestión del Porcino de la Unión Europea para autorizar la intervención de la Generalitat se haya postergado hasta la próxima semana.
El laboratorio de referencia de Valdeolmos, en Madrid, confirmaba ayer la existencia del nuevo foco de PPC en una explotación de Vic. Los 76 animales de la granja la Torre Negra ya han sido sacrificados de forma preventiva. La aparición de este nuevo foco alerta que el virus aún no está controlado y que continúa extendiéndose. Por ahora ya se han sacrificado unos 102.000 cerdos y, como consecuencia de este nuevo caso, se prevé sacrificar unos 9.000 más en el radio de precaución alrededor de la granja afectada.
La explotación Torre Negra esta situada en el término municipal de Vic, muy cerca de Calldetenes, donde se detectaron los primeros focos. Esta proximidad no ha evitado que numerosas granjas se vean afectadas por este nuevo foco, ya que fuentes del sector afirman que la mayoría de granjas que se libraron de los sacrificios hace un par de meses ahora se verán afectadas.
En manos del ministerio
El desánimo habita de nuevo entre el sector, que tan sólo unas horas antes de la confirmación del nuevo foco, conocía la noticia de que Bruselas aceptaba las medidas de mercado. Pese a ser una buena noticia, los ganaderos aún no cantan victoria porque la última palabra sobre la aplicación de estas medidas la tiene el Ministerio de Agricultura, organismo que por el momento se ha mostrado muy poco receptivo hacia las peticiones del sector.
Representantes del sindicato agrario Unió de Pagesos (UP) y de la asociación tecnicosanitaria Assaporc han estado esta semana en Bruselas para exponer ante las comisiones de gestión y sanidad animal de la Unión Europea la situación que se vive en la comarca a raíz de la declaración de la peste porcina. La primera sorpresa que se llevaron fue que en Bruselas no se había recibido ninguna notificación oficial del Ministerio de Agricultura español sobre la actual crisis hasta anteayer.
Miembros de las comisiones europeas confirmaron a los representantes del sector que la próxima semana se pondrá en marcha el protocolo previsto en estos casos y que las medidas de mercado podrán aplicarse oficialmente a partir del día 20 de febrero.
La ley establece que el Estado miembro puede autorizar el inicio de la compra pública de los animales sin aguardar a que la UE lo publique oficialmente, ya que este trámite puede efectuarse con carácter retroactivo. Pese a ello, el sector teme que el Ministerio de Agricultura no esté por la labor y retrase la aplicación de las medidas.
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