El Ebro incontrolado

El pasado 25 de diciembre más de 3.000 peces aparecieron muertos en Ascó por intoxicación aguda de mercurio. Una semana después, el 2 de enero, el agua potable procedente del Ebro y suministrada a 40 municipios de Tarragona apareció contaminada por mercurio con niveles que superan la legalidad. Son episodios que no sólo revelan la fragilidad ecológica del río en su tramo catalán -a la que se ha añadido esta semana dos nuevos vertidos de hidrocarburos-, sino la necesidad, reclamada por todas las formaciones políticas, de aumentar los controles de la calidad del agua del río y del agua potable. Los hechos de los últimos días plantean diversas preguntas.

- ¿Por qué se tardó más de una semana en detectar la presencia de mercurio, con niveles suficientes para matar a más de tres mil peces?

Un toxicólogo del CSIC apunta que en cantidades pequeñas el mercurio daña la salud

El mercurio pudo haberse distribuido a la red de agua potable durante cinco días

Los organismos encargados de la gestión del río, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y la Generalitat a través de la Agencia Catalana del Agua (ACA), atribuyen la responsabilidad primera a las empresas causantes de la contaminación.

Tanto la CHE como la ACA mantienen guardas en el río y realizan análisis periódicos de la calidad del agua. La CHE analiza diariamente variables generales de calidad, con 30 estaciones conectadas vía satélite y 200 puntos de muestreo en todo el canal. Los análisis diarios no incluyen contaminación por metales pesados. Los del ACA, tampoco.

Las detecciones de sustancias peligrosas las realiza la CHE cada 15 días y los del ACA son mensuales. Ésta es la explicación que los organismos dan de la tardanza en detectar niveles de mercurio 25 veces por encima de lo habitual en el río, así como del hecho de que sus análisis no se centraran en el mercurio hasta que éste apareció, el 2 de enero, en el agua del grifo de 350.000 viviendas de la provincia de Tarragona.

Mientras los dos organismos no tuvieron resultados de las muestras recogidas en peces y agua, ofrecieron versiones contradictorias, lo que creó mayor confusión entre la población. La ACA, que hasta el 27 de diciembre no recogió muestras, fue la primera en apuntar a un vertido incontrolado y abrió un expediente informativo a la empresa química Ercros, ubicada en Flix y la única en la zona que utiliza mercurio en su producción. La CHE afirmaba que la muerte de los peces era atribuible a un estrés térmico provocado por las temperaturas extremas de los últimos días. Después de una inspección a Ercros, el pasado martes la CHE abrió un expediente sancionador. Según los resultados, los niveles de mercurio eran de 7,7 microgramos por litro, una cantidad 25 veces superior a las habituales.

¿Por qué no se detecta el mercurio en el agua del Ebro suministrada como potable a 40 municipios por el Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT)?

La aparición de los peces muertos no se vinculó a la presencia de mercurio en el agua, según explicó el gerente del consorcio, Leandro López. Los análisis de metales pesados, dentro de la legislación vigente para el abastecimiento de hasta un millón de personas, se efectúan una vez al mes en la potabilizadora del CAT de L'Ampolla. La contaminación llegó a oídos del CAT desde la empresa municipal de aguas de Tarragona, que sí hizo análisis el 2 de enero. Una vez alertada, la ACA estudió la potabilizadora. La entrada de aguas no detectó contaminación, pero sí su salida. Según reconoce el gerente, el mercurio podría haberse distribuido a la red durante un periodo máximo de cinco días.

- ¿Por qué fue la empresa de aguas de Tarragona la que dio la voz de alerta?

El presidente de la Empresa Municipal de Aguas de Tarragona (EMATSA), Angel Fernández, explica que tuvieron 'el instinto' de verificar la calidad del agua cuando supieron de la mortandad de peces en el río. La EMATSA, curiosamente, tiene subcontratados los análisis del CAT y comparte sus laboratorios. Tarragona resolvió la contaminación mezclando el agua del Ebro con la que obtiene de otras fuentes, con lo que diluyó el contenido de mercurio hasta parámetros tolerables. Esta solución, con la recomendación del CAT de que se utilizaran fuentes alternativas, fue la que siguieron la gran mayoría de los municipios del consorcio.

- ¿Qué niveles de contaminación hubo en el agua potable?

Los niveles máximos que se dieron a conocer en un principio eran de 2,3 microgramos por litro. El pasado jueves, Sanidad sorprendió con una cifra de 3,1, situada en un punto inconcreto de la red de distribución, parámetro que supera con creces el microgramo por litro permitido por la ley y aconsejado por la OMS.

- ¿Es realmente tan inocua la presencia de mercurio en el agua?

Según Sanidad, no ha existido riesgo para la salud por el episodio aislado y corto en el tiempo de ingesta de agua. Eduardo Rodríguez, toxicólogo del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), organismo que ha colaborado con la ACA en el análisis de los peces, apunta que en cantidades relativamente pequeñas el mercurio puede producir lesiones a medio plazo.