_
_
_
_
Reportaje:NOTICIAS Y RODAJES

Las parejas de cine soñadas por Juan Marsé

El escritor publica la reunión de artículos 'Un paseo por las estrellas'

M ientras el rastro del cuerpo luminoso de Marilyn Monroe descansa en las manos de Juan Marsé, y los marmóreos labios de Grace Kelly rozan la cara de Fernando Fernán-Gómez, la mirada traviesa de Orson Welles aún parece asomar en los ojos de Rafaela Aparicio. Son tres herederos españoles de tres legados impensables. De una herencia descubierta gracias al libro-juego creado por Juan Marsé. Un divertimento para cinéfilos y 'un reto a la memoria funámbula del aficionado', asegura el escritor catalán. Un paseo por las estrellas (RBA) es un libro que dibuja un nuevo planisferio del universo cinematográfico al unir parejas insospechadas desandando los pasos profesionales que han seguido sus estrellas y sus conexiones a través de terceros.

Se trata de la recopilación de artículos publicados por el autor de Rabos de lagartija en el suplemento Babelia de EL PAÍS, entre 1995 y 1996, y las rutas de asociaciones de parejas están sembradas de opiniones críticas, apasionadas, irónicas, divertidas, amorosas.

El primer flash que tuvo el escritor catalán sobre el hallazgo de esa herencia de cine surgió cuando Jorge Semprún le presentó a Yves Montand, en Valencia, hace más de veinte años. El actor francés le estrechó la mano y Marsé tuvo una revelación, el nacimiento de un nuevo sentimiento y de una vanidad secreta; no tanto por acabar de conocer al hombre del eterno pañuelo anudado al cuello, sino porque en ese choque de manos Montand se había convertido en un mensajero de un tiempo-espacio que él adoraba y que le obligó a decirse: 'Chaval, es la misma mano afortunada que acarició el cuerpo luminoso de Marilyn Monroe'. No lo podía creer. Ha sido el día en que el autor de El amante bilingüe ha estado más cerca del mito más soñado de Hollywood. Y una verdad cruzó su cabeza: 'Nunca en la vida, capullo, me dije, volverás a estar tan cerca de Marilyn', confiesa Marsé en el prólogo del libro.

El episodio se convirtió en una especie de fuegos artificiales que iluminaron el universo cinematográfico del autor de El embrujo de Shanghai. Vio cómo las estrellas 'se arrojan luz unas a otras', a la vez que están unidas por estelas que crean conexiones inimaginables. Entonces Marsé acudió a sus amigos, entre ellos Terenci Moix y José Luis Guarner, y empezaron a proponer parejas dispares y a buscar los lazos que las podrían unir. Poco a poco se creó una bóveda cinematográfica donde las constelaciones no eran los signos del zodiaco, sino los destinos paralelos y soñados de amores y desamores, amistades y odios, venganzas y despechos.

Un juego evocador y de complicidad artística en el que, por ejemplo, el escritor tuvo que enfrentarse a la verdad de que había otro español que había estado más cerca de Marilyn. Pepe Isbert. Una aproximación que Marsé relata sin envidias y que sirve de guía para apreciar este original mapa: 'Isbert y Richard Basehart celebran juntos Los jueves, milagro, película de 1957, realizada según el rito malicioso y fallero de Berlanga. Un año antes, Basehart, como el marinero Ismael, y John Huston, como maestro de ceremonias y coctelero mayor, persiguen a la ballena entre procelosos mares de whisky y maldiciones bíblicas: Moby Dick. Y es precisamente el gran John Huston quien deposita a la joven Marilyn en medio de La jungla de asfalto en 1950. Por tanto, de Pepe Isbert a Marilyn Monroe no hay más que tres pasos. ¿O tal vez menos?'.

Acompañado de magníficas fotos, el texto deja ver las vueltas y revueltas que unen a Pablito Calvo y Louise Brooks, Ana Belén y Jack Nicholson, Joselito y Mae West, Victoria Abril y Cary Grant, Gracita Morales y Woody Allen...

Pepe Isbert y Marilyn Monroe
Pepe Isbert y Marilyn Monroe

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_