La guerrilla colombiana secuestra a dos españoles y pide 500 millones por uno de ellos

El español Francisco Álvarez Monedero, de 46 años, fue secuestrado el 9 de septiembre cerca de la ciudad colombiana de Cartagena de Indias. Los secuestradores piden a los propietarios de la empresa en la que trabaja Álvarez dos millones y medio de dólares (unos 500 millones de pesetas). El mismo día 9, la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) secuestró a 27 personas en un hotel de vacaciones en el departamento de Antioquia, entre ellas a la ciudadana hispano-colombiana Natalia Surianu Jaramillo.

Desde Tarragona, la familia de Álvarez trata de negociar con los secuestradores, supuestos miembros de las FARC, una rebaja del rescate. 'Estoy bien, por navidades, que no venga mi hija', fueron las únicas palabras que los secuestradores dejaron pronunciar a Francisco Álvarez en una comunicación telefónica con Eduardo Barrachina, uno de los propietarios de la empresa en la que trabaja.

Natalia Surianu, de 26 años, es hija de una colombiana y un español llegado a Colombia en los años sesenta, y estudia ingeniería administrativa en la Universidad de Antioquia, en Medellín. Fue secuestrada por las FARC junto a otras 26 personas en un hotel de la localidad de Jardín; cinco de los secuestrados fueron asesinados poco después. La joven está secuestrada junto a una prima suya, Adelaida Jaramillo, de 21 años, quien no quiso separarse de Natalia y actuó como otros familiares, que se unieron al grupo de secuestrados para no dejarlos solos.