La ministra dice que las reformas deben debatirse en el Parlamento y no en la calle

La ministra de Educación, Pilar del Castillo, respondió ayer por primera vez, durante una sesión de control al Gobierno en el Congreso, a preguntas de la oposición de izquierda sobre las masivas movilizaciones contra la Ley Orgánica de Universidades (LOU). PSOE e IU le endosaron una batería de ocho preguntas donde se recogían los argumentos de los colectivos universitarios que se oponen a esa ley. Del Castillo replicó que, en una democracia, el Parlamento tiene más valor y legitimidad que las protestas en la calle 'alentadas' por partidos como el PSOE.

Siete diputados socialistas y el líder de IU, Gaspar Llamazares, convirtieron la sesión de ayer casi en una disputa monográfica contra la insensibilidad del Gobierno de mayoría absoluta del PP y, en particular, de la ministra para escuchar la voz de la calle contra la reforma universitaria.

También le achacaron pretensiones elitistas, a favor de los estudiantes con más posibilidades económicas. Del Castillo no aceptó ninguna crítica y apenas concretó nada en sus respuestas. No definió la postura de su ministerio sobre si habrá o no reválida al final del bachillerato y acusó a la oposición de falsear, manipular y agitar a los estudiantes.

El PP aumentará 'la tensión' de sus campañas en defensa de la ley, incluso a través de su organización juvenil, tras constatar que el PSOE ha decidido convertir la universidad en el 'campo de batalla' más 'radical' para poner en práctica una oposición que el secretario general del partido, Javier Arenas, calificó 'de pancarta'. Arenas vaticinó al PSOE que así nunca llegará al poder.