El Gobierno desoye la recomendación de permitir la investigación con embriones

El Gobierno no parece dispuesto de momento a escuchar la propuesta que le presentó el lunes la Comisión Nacional de Reproducción Asistida para que reforme 'en el plazo más breve posible' la Ley de reproducción asistida de 1988 y permita la investigación con embriones. Si se cambia la ley, se hará 'de forma serena', indicó ayer la ministra de Sanidad, Celia Villalobos. El informe estaba listo desde hace 18 meses. En él, los expertos se quejan de 'las dificultades' que encuentran para que 'cambien las normas'. Ana Veiga, miembro del comité, resume: 'Trabajamos para nada'.

La Comisión Nacional de Reproducción Asistida recomendó que se permitiera investigar con los embriones sobrantes de los procesos de fecundación asistida. La ley de reproducción humana obliga a conservarlos cinco años, pero no dice qué debe hacerse con ellos una vez superado este plazo.

El Ministerio recibió este informe un día después de que se conociera la noticia de que la empresa estadounidense Advanced Cell Technology (ACT)había clonado embriones humanos de hasta seis células. El experimento utiliza la misma técnica que permitió la clonación de la oveja Dolly en 1997.

Villalobos se refirió ayer en los pasillos del Senado tanto a la implantación de las normas propuestas por la comisión de asesores como a los experimentos de ACT. El Ministerio de Sanidad 'está analizando el debate' que se ha suscitado, dijo Villalobos, quien añadió que se trataba de una polémica en la que 'todos los españoles' tienen 'el derecho y el deber de opinar'. 'Decisiones de esta naturaleza no se pueden tomar en un momento seguido por la inmediatez de una noticia', afirmó la titular de Sanidad.

Carácter 'consultivo'

Por su parte, el secretario general de Coordinación y Gestión Sanitaria, Rubén Moreno, que fue quien presidió la reunión de la comisión el lunes, recordó ayer el carácter 'consultivo' del organismo. El equipo de asesores, que se creó en 1997, está formado por 25 miembros, entre biólogos, médicos y expertos en derecho y bioética. De ellos, 22 votaron a favor de que se permitiera la investigación con embriones y tres votaron en contra. De entre los primeros, dos suscribieron un voto particular opuesto a modificar la ley aduciendo que la actual ya permite la investigación con embriones congelados.

Sobre la posibilidad de reformar la ley, Moreno afirmó que España está 'en el entorno del debate europeo'. 'Aunque las leyes las haga cada país, lo que está claro es que lo que se legisle en Francia o Italia afecta a España, y viceversa', declaró el subsecretario de Sanidad para justificar que no creía 'que España deba ser la avanzadilla' en las normas al respecto. En Europa, sólo el Reino Unido y Suecia permiten la investigación con células madre embrionarias.

En línea con las declaraciones del lunes de la ministra de Ciencia y Tecnología, Anna Birulés, Moreno sugirió que antes de cambiar la ley deberían estudiarse otras líneas de investigación para obtener células madre. '¿Quién nos dice que dentro de unos años no veremos estas propuestas como un disparate?', se preguntó.

Aunque en España no hay un censo de los embriones que permanecen congelados, su cifra puede rondar los 40.000, según Veiga, jefa de la sección de Biología del Instituto Dexeus de Barcelona. De ellos, entre el 15% y el 20% sobrepasa los cinco años de crioconservación.

Las quejas de los miembros de la Comisión no se refieren sólo a su último informe, sino a la acogida de un primer documento elaborado en diciembre de 1998. 'Desde entonces, no se ha hecho nada', manifestó Veiga. Diana Guerra, de la asociación de ayuda a la fertilidad Genera, confirmó esas quejas. 'El primer informe no tuvo ninguna repercusión; del segundo nos han dicho que ni se va a publicar', declaró. Veiga se quejó de su 'indefensión'. 'Dedicamos muchas horas, expresamos nuestra opinión sobre un tema muy delicado y complicado, y luego no sirve para nada', se lamentó.