Los muertos por las lluvias y avalanchas en la capital de Argelia se elevan a 575

El balance de muertos en Argelia tras las intensas lluvias caídas durante el fin de semana se incrementó dramáticamente ayer con la recuperación de más de 200 cadáveres en un barrio de la capital, Argel. De esta manera, y según las cifras oficiales, son al menos 575 las personas que han muerto y otras 316 resultaron heridas.

Los equipos de rescate se concentraron ayer en la búsqueda de desaparecidos. Las labores se centraron en la barriada popular de Bab el Ued, en el oeste de la capital.

El Ejército y los bomberos, ayudados por la población, intentaban rescatar a las víctimas que se encontraban aún bajo toneladas de escombros y barro en el citado barrio, que fueron arrastradas por las fuertes lluvias. Las estimaciones sobre el número de muertos son pesimistas, ya que en el mercado del barrio, literalmente sepultado por el lodo, podrían encontrarse todavía más víctimas.

Asimismo, el mar continuaba ayer arrojando los cadáveres de las personas que se vieron arrastradas por las crecidas.

Ayer, la prensa argelina publicó que parte del alcantarillado de Bab el Ued fue taponado y obstruido por el Ejército hace años en su lucha contra los islamistas radicales, quienes utilizaban la red subterránea para huir tras cometer atentados. Los periódicos también criticaron que el Gobierno, tras haber conocido las preocupantes previsiones meteorológicas, hubiera organizado 'una plegaria en vez de un plan de evacuación'. Y es que el Gobierno mantuvo una convocatoria de oración para el viernes, cuando comenzaron las lluvias.