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Las tribus dibujan el futuro gobierno de Afganistán

Opositores afganos organizan hoy en la ciudad paquistaní de Peshawar una conferencia sobre la transición en Kabul

Ángeles Espinosa

La Alianza del Norte no es la única oposición afgana a los talibanes. Numerosos líderes tribales y políticos pastunes, así como ex jefes militares de la guerra contra la Unión Soviética, se sintieron dejados de lado por el acuerdo firmado en Roma entre el ex rey Mohamed Zahir Shah y los dirigentes de la Alianza. Abanderados por Pir Gailani, respetado líder moderado, organizan hoy en Peshawar (Pakistán) una gran conferencia 'por la paz y la unidad nacional en Afganistán'.

La asamblea, a la que están convocados un millar de afganos de dentro y fuera del país, puede dar el impulso definitivo a la formación de un Gobierno de transición o abrir una brecha en ese proceso político que apoya la comunidad internacional.

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'Se trata de una reunión para determinar nuestra contribución a la paz', explica Gailani a EL PAÍS. A ella confía en que acudan 'prominentes jefes tribales, académicos, políticos y ex comandantes, de todos los segmentos de la sociedad afgana'. Sin embargo, en un momento en que el proceso de Roma parece haber sufrido un parón, la conferencia ha despertado la preocupación no sólo del entorno del ex rey y los dirigentes de la Alianza, sino también de la comunidad internacional, que ha apostado por una transición con el ex rey a la cabeza.

'El rey es una figura muy importante. Eso no significa que sea el último tejado. Es lo que nosotros recomendamos, pero dejemos que la gente decida', pide Gailani en el jardín de su casa de Peshawar. Afuera, dos docenas de hombres enturbantados esperan a ser recibidos. Dos individuos ostensiblemente armados con Kaláshnikov vigilan el acceso hasta él. Gailani asegura que no es su intención boicotear el citado plan de paz. Sin embargo desestima como 'prematuro' el acuerdo para formar un Consejo Supremo (120 miembros elegidos por el rey y la Alianza para dirigir la transición).

Zahir Shah, de 87 años, fue depuesto en 1973 por su primo Daud. Desde entonces ha vivido exiliado en Roma y todos los intentos por implicarle en los proyectos de reconciliación para su país habían fracasado. A raíz de la crisis abierta por los atentados del pasado 11 de septiembre, el ex monarca aceptó reunirse con dirigentes de la Alianza del Norte y enviar un mensaje de unidad a su pueblo. La idea, impulsada desde hace tiempo por la ONU, se sustenta en que todos los grupos étnicos están representados: los pastunes (un 40% de la población) a través del rey y las minorías (tayicos, uzbecos, hazaras, etc.) a través de la Alianza.

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'Si no apoyan la iniciativa de su majestad y su programa, podrían crear una gran confusión, aunque acepten su figura', reconoció en una reciente entrevista a este diario Hedayat Amin Arsala, jefe de la delegación del ex rey en las conversaciones con Pakistán. Algunas fuentes de esa delegación fueron más lejos y, desde el anonimato, hablaron de 'elementos que tratan de minar esos esfuerzos'. Sin mencionarlo por su nombre, se referían a Pakistán.

Los observadores consultados están divididos entre quienes creen que Gailani trata de formar un frente pastún para apoyar al ex rey y quienes ven en la reunión de hoy la mano de los servicios secretos paquistaníes para frenar el avance político de la Alianza. 'Pakistán está trabajando para conseguir una solución pastún alternativa', manifiesta por su parte un diplomático, que subraya que una conferencia de la envergadura de la de hoy no puede celebrarse sin contar con el visto bueno de las autoridades paquistaníes.

Gailani desmiente esas acusaciones y asegura que durante su entrevista con el rey, la semana pasada en Roma, le dio garantías de sus intenciones. 'Sabe muy bien que sin nuestro apoyo, será difícil encontrar una solución', afirma, antes de asegurar que la asamblea de hoy 'no supone un plan paralelo o una diversión' de Roma. Insiste en que lo único que buscan son 'propuestas sobre cómo llevar a cabo la transición, fórmulas, sugerencias'.

La clave está en ver quiénes participan hoy en la asamblea. 'No nos han invitado', declaraba el lunes a esta enviada Sibghtullah Zaki, portavoz en Pakistán del general Abdurrashid Dostum, uno de los principales socios del Frente Unido. Zaki se quejaba de la composición de la lista de asistentes y quitaba importancia al peso de los convocantes dentro de Afganistán. A última hora, los representantes de la Alianza han decidido asistir 'a ver cómo se desarrolla', lo que puede convertir la cita en el primer paso hacia la aceptación por parte de Pakistán del papel de la Alianza en el futuro Gobierno afgano.

'Da la impresión de que han solucionado sus diferencias', constata Abdul Rasul Amin, director del Centro de Estudios Afganos, en referencia a la entrevista entre Gailani y el rey. Amin admite, sin embargo, que sigue habiendo interferencias de los países vecinos y, sin mencionar a ninguno, dice que 'no son sinceros en sus palabras'.

La policía trata de detener una manifestación antiamericana cerca de la ciudad paquistaní de Jacocabad, donde hay tropas de EE UU.
La policía trata de detener una manifestación antiamericana cerca de la ciudad paquistaní de Jacocabad, donde hay tropas de EE UU.AP

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Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

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