Cavallo se enfrenta a su última oportunidad

El Gobierno argentino se someterá esta semana a la primera prueba en el nuevo escenario político después de la derrota electoral con la negociación de nuevas medidas económicas de ajuste fiscal. Será también, en opinión de los analistas, la última oportunidad del ministro de Economía, Domingo Cavallo, blanco de las críticas de la oposición, de los sindicatos y de un amplio sector del radicalismo, soporte de Gobierno de la Alianza.

Para cumplir con la política de déficit cero, el ministro tiene en cartera un canje de los bonos de la deuda pública que están en poder de los fondos de pensiones por otros de menor interés (del 14% al 8%) pero con mayores garantías procedentes de la recaudación impositiva. Asimismo, Cavallo pretende otro canje de la deuda que tienen las provincias con los bancos locales y que asciende a 8000 millones de dólares.

Con ello, los Gobiernos provinciales verían disminuido considerablemente el pago de intereses. Todo ello exige una ardua negociación en la que el Gobierno necesita el apoyo político de las provincias, mayoritariamente bajo control de la oposición peronista, para garantizar los nuevos bonos y aquellas, a cambio, reclaman garantías de que percibirán los 1.364 millones de dólares mensuales que reciben del Estado en concepto de coparticipación de impuestos.

Primer contacto

Mañana hay prevista una reunión de los gobernadores con Cavallo en la que éste pedirá apoyo para una nueva vuelta de tuerca en el ajuste fiscal en el sector público. El Gobierno pretende adelantar la jubilación de unos 20.000 funcionarios y eliminar varios organismos y departamentos oficiales. Con el recorte de gastos y el canje de deuda Cavallo confía en cumplir el déficit cero hasta fin de año, teniendo en cuenta que debe a hacer frente al pago de unos 1500 millones de intereses de la deuda externa. La caída de la recaudación de impuestos en los últimos meses ha obstaculizado los planes del titular de Economía, a quien se le agotan las cartas.

Políticamente debilitado por la ola de críticas que recibe la política económica y la incertidumbre de su permanencia en el Gobierno, Cavallo no obtuvo el domingo unos resultados alentadores en las urnas. Su partido Acción por la República ha retrocedido del tercer al cuarto lugar, al ser superado por la nueva fuerza política Alternativa para una República de Iguales de la diputada Elisa Carrió. Cavallo no oculta sus ambiciones presidenciales de cara al 2003, pero hasta ahora no ha logrado superar con éxito ninguna cita ante las urnas.

Quien tampoco ha renunciado a competir en la carrera electoral es el ex presidente Carlos Menem, en arresto domiciliario por el escándalo de la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia.