¡Ya era hora!

Por fin, Estados Unidos se ha atrevido a hacer lo que todos tendríamos que haber hecho desde hace años, pero nadie se atrevió: acabar con la vergüenza de un régimen peor que el nazi. ¿Cómo se puede hablar de derechos humanos cuando se permite la existencia de un país cuya política principal consiste en el exterminio lento e inexorable del sexo femenino, como los nazis se dedicaron al exterminio de los judíos? ¿Cómo hay alguien que puede decir que no se puede derribar ese régimen, y lo dice en nombre de la paz? ¿Qué paz, qué vida, tienen las mujeres afganas, recluidas en los campos de concentración que son sus casas, sin alimentos, sin medicinas?

Ahora comprenderán por qué me moría de vergüenza ajena el domingo, a las ocho de la tarde, en Sol, cuando oí la manifestación de los contrarios a la guerra. Es como si el día en que Inglaterra se defendía de la agresión nazi hubieran salido unos ¿pacifistas? a la calle a chillarle vivas a Hitler y muerte a los judíos. (Lo hicieron, encabezados por Edward Mosley, jefe de los nazis ingleses, entre 1940 y 1942).

Porque son los fundamentalistas islámicos los que nos agreden a nostros, y no al revés. Porque la no intervención en Afganistán significa, literalmente, el condenar a los afganos a un exterminio a manos del fundamentalismo islámico. Y detrás, el resto de los europeos.

Recuerden: a Hitler le dejamos comerse Checoslovaquia en 1938 en nombre de la paz y luego atacó al resto del continente.

Sólo espero que la intervención armada nortamericana prosiga hasta que caiga el régimen talibán y todos sus jefes comperezcan ante un Tribunal Penal Internacional, como se hizo con los nazis en Núremberg y que, como en Irak, Estados Unidos no sea cobarde y no deje las cosas a medio hacer. Espero también que se presione por todas las vías a Arabia Saudí. Que sea aliado en la coalición actual no hace menos repugnantes sus crímenes contra sus ciudadanos y la situación de esclavitud en la que se encuentran sus ciudadanos, sobre todo las mujeres.

¿Por qué la gente se escandaliza cuando mueren hombres y nadie protesta por la esclavitud de la mujer en todo el mundo, sobre todo el islámico?

Se habla mucho de las ofensas que Europa ha hecho a los árabes. ¿Y las ofensas que ha hecho el islam a la mujer desde el siglo VII hasta nuestros días? ¿Y los crímenes que siguen perpetrándose en todo el mundo islámico contra la condición femenina en nombre del Corán?

¿Es que todavía no se han dado cuenta de que el islam se basa en la guerra santa, traducido, la intolerancia y el sometimiento por medio de la espada de los que no son como ellos? (Sí, me he leído el Corán, hablo con conocimiento de causa).

Perdón, acabo de darme cuenta. Es que para la mitad de los 'pacifistas' y de las cancillerías europeas las mujeres seguimos sin ser seres humanos. Por eso no importa lo que nos pase.