Los partidos del Gobierno copan las comisiones de la Cámara al rechazar la oposición un pacto

Los tres partidos que integran el Ejecutivo se repartieron ayer los puestos de responsabilidad en las 14 comisiones permanentes del Parlamento vasco al rechazar populares y socialistas negociar la oferta final del PNV de que presidiesen tres de ellas. Finalmente, los peneuvistas presidirán nueve comisiones, mientras que Eusko Alkartasuna se queda con cuatro e Izquierda Unida, una.

Aunque la constitución de las comisiones se desarrolló ayer tarde dentro de la normalidad, los sucesivos portavoces del PP recordaron antes de cada una de las votaciones que su presencia no significaba renunciar a la presentación de su anunciado recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional por la decisión previa de la Mesa de la Cámara de constituirlas con 18 miembros (nueve de PNV, EA e IU y nueve de las tres formaciones de la oposición).

Socialistas y populares consideran inaceptable que la minoría que tienen el pleno las tres formaciones que apoyan al Ejecutivo (36 diputados sobre un total de 75) no se haya trasladado a las comisiones. Por ello, los tres partidos de la oposición no presentaron candidatos y votaron en blanco a los de las formaciones que respaldan a Ibarretxe.

Esa postura permitió que el PNV, además de las presidencias citadas, se hiciese con cuatro vicepresidencias y siete secretarias, mientras que Eusko Alkartasuna tendrá seis vicepresidencias y seis secretarías e Izquierda Unida, tres vicepresidencias. En la única comisión en que no se produjo protesta alguna fue en la de Urgencia Legislativa, Reglamento y Gobierno cuya constitución se hace de manera automática con un miembro de cada partido, pero sin la presencia de Batasuna.

La constitución de las 14 comisiones comenzó a primera hora de la tarde, pero los partidos de la oposición ya habían dedicado la mañana a establecer sus posiciones. Cuando todavía se escuchaban los ecos de las protestas por la decisión de la Mesa de no reproducir en las comisiones la minoría de los grupos del Gobierno en el pleno, el grupo socialista se apresuró a dejar claro que, aunque Batasuna tiene la llave de la mayoría, el PSE no piensa buscar sus votos.

Su portavoz, Rodolfo Ares, declaró que la primera decisión que habían adoptado los socialistas relacionada con ese asunto era no presentar candidatos a esos órganos parlamentarios y así evitar que Batasuna pudiera apoyarles. El PSE sabía que dos diputados de la formación independentista -Jone Goirizelaia y Antton Morcillo- iban a participar en las votaciones, así que se sumó a la propuesta del PP de votar en blanco todos los nombres y evitar una jugada de Batasuna. Máxime cuando el PNV había ofrecido a populares y socialistas un pacto para que presidiesen las comisiones de Presupuestos, Sanidad e Incompatibilidades. El PP ni siquiera llegó a estudiar esa propuesta, ya que se mantiene en su idea de presentar un recurso de amparo al Tribunal Constitucional por el reparto de representantes para cada grupo acordado por la Mesa de la Cámara. El portavoz popular, Leopoldo Barreda, reiteró que esta decisión es 'firme'. El PSE aún no ha decidido si irá a los tribunales por la misma causa.

Los socialistas reconocieron que Batasuna tiene la llave de la mayoría absoluta y culparon a los nacionalistas de este hecho. Según Ares, la 'irresponsabilidad' del PNV al pactar con IU y quedarse en minoría ha provocado esa situación. Los socialistas recalcaron que, 'siempre que no sean cuestiones básicas para la alternativa al Gobierno' o de su ideario buscarán 'todos los procedimientos' para que Batasuna no les apoye.