Un dirigente de Agaden posee una vivienda sin registrar en una zona rústica

El vicepresidente de la Asociación Gaditana en Defensa de la Naturaleza (Agaden), Alfonso Del Castillo Gámez, tiene una vivienda sin permisos municipales en una finca rústica de su propiedad, de 4.400 metros cuadrados, ubicada en el paraje agrícola de las Espadañuelas, en Chiclana de la Frontera (Cádiz). Según consta en el Registro Catastral y en el Registro del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) del Ayuntamiento de Chiclana, en esta finca hay una vivienda de 63 metros cuadrados que, sin embargo, no tiene autorización municipal de obras ni aparece en el Registro de la Propiedad.

Alfonso Del Castillo se ha caracterizado en los últimos años por emprender constantes campañas de denuncias contra operaciones urbanísticas supuestamente ilegales enclavadas en zonas rústicas o protegidas.

Las normas subsidiarias del planeamiento urbanístico del Ayuntamiento de Chiclana prescriben que las parcelas rústicas de menos de 6.000 metros cuadrados no pueden albergar viviendas. Además, este dirigente ecologista dispone únicamente de una licencia municipal de obras que data del año 1977, en la que el consistorio chiclanero autorizó la construcción de un cobertizo con fines agrícolas para herramientas y aperos de labranza.

Del Castillo aseguró ayer que obtuvo una licencia posterior para ampliar el cobertizo hasta llegar a los 24 ó 25 metros cuadrados. Con todo, estos dos permisos de obras no se corresponden con las características de la edificación, según consta en los mencionados registros oficiales.

Pago del IBI

Se da la circunstancia de que esta vivienda ha sido dada de alta en el catastro, donde ha sido valorada para el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles. Alfonso del Castillo aparece como propietario en la ficha catastral, aunque afirmó desconocer si ha abonado este impuesto. 'No sé exactamente qué es lo se está pagando o qué es lo que no se está pagando', dijo. Con todo, el abono del IBI no normaliza la situación irregular de una vivienda.

Este destacado dirigente ecologista negó ayer que utilice esta construcción como una vivienda y aseguró que se trata de un almacén que tiene 'una función totalmente agrícola'. Más tarde, reconoció que en esta edificación hay una habitación y un cuarto de baño. Asimismo, rechazó que haya cualquier situación irregular. Con todo, afirmó que son construcciones de 1977 que 'han prescrito urbanísticamente porque han pasado más de cuatro años'.

Alfonso del Castillo informó también que en la finca hay además una 'antigua cuadra sin uso', un grupo de balates o muros para contener la humedad de unas plantaciones tropicales, y un invernadero con estructura de hierro.