Halladas en un contenedor tres bombas cargadas de la guerra civil

Tres proyectiles antiaéreos de la guerra civil fueron hallados la mañana del pasado martes en un contenedor de obras situado frente al número 23 de la calle de Francisco Suárez, en Chamartín, por dos conserjes de inmuebles cercanos, según informó ayer la Dirección General de la Policía. Los artefactos, uno de casi un metro de longitud y los otros de unos 30 centímetros, estaban en buen estado de conservación y cargados con explosivo, aunque tenían el seguro puesto, según fuentes policiales.

'Estaban medio protegidos con tubos de cartón. Eran de metal de color bronce y tenían toda la pinta de estar bien, así que ni los tocamos', dijo uno de los conserjes. Éste añadió que vieron los proyectiles sobre las siete y media de la mañana, aunque admite que no llamaron a la policía entonces.

Quienes alertaron a la Policía Municipal fueron otro vecino y el conserje de su edificio. 'Los vimos más tarde que mis compañeros. Cuando llamábamos a la policía llegó un chatarrero que viene casi cada día. Yo le dije: 'Hoy no cojas nada que vas a salir volando', recordaba ayer.

La Policía Municipal alertó a la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Chamartín, que puso los proyectiles bajo custodia de los artificieros del Tedax. Fuentes policiales dijeron ayer que investigan el origen de los proyectiles, aunque no dieron detalles de la investigación.

Los vecinos comentaban que los artefactos podrían haber sido encontrados por los operarios que levantan una zanja. 'Seguro que los han encontrado ellos y, para no parar las obras, los han tirado al contenedor', comentó un residente.

Los operarios lo negaban. '¿Cómo nos vamos a jugar la vida así?', se quejó uno de ellos. 'Además, los encontraron a las siete de la mañana, antes de que llegáramos', añadió.

'En el barrio viven militares de alta graduación. Para mí que alguna familia se ha cansado de tenerlas en casa', aventuró el conserje que alertó a la policía. 'No me ha hecho gracia ver tres bombas a dos metros de distancia. Otro día, que se desprendan de ellas de otro modo', añadió.