La investigación sobre las comisiones de Bazán se dirige hacia Pinochet

El ex ministro de Defensa chileno, Edmundo Pérez Yoma, defiende la compra de dos submarinos Scorpene a los astilleros españoles Bazán y asegura que carece de datos sobre un presunto desvío de fondos para la defensa y manutención de Pinochet. Su testimonio se ha producido ante la Comisión parlamentaria que investiga en Chile en qué se usaron los 546 millones de pesetas pagados por Bazán a Seapoint Entreprises, según reveló el Tribunal de Cuentas de España y publicó este diario el pasado 4 de junio.

Uno de los diputados que impulsó esta comisión investigadora, Guillermo Ceroni, sospecha que parte de este dinero se destinó a financiar la manutención y defensa de Augusto Pinochet mientras éste se encontraba arrestado en Londres. El bufete británico Kingsley Napley, que atendió la defensa del ex dictador en relación con la petición de extradición española, declinó realizar todo comentario al respecto cuando este diario le preguntó por escrito si tenía alguna relación con Seapoint y con la firma que lleva su administración en las islas Jersey, el trust Mourant and Co. 'Gracias por su fax. No puedo atenderle en sus preguntas', fue la respuesta del bufete.

En noviembre de 1998, pocos días después de la detención de Pinochet, el entonces jefe de la Armada chilena, el almirante Jorge Arancibia, comunicó a Bazán y a su socio francés DCN la intención de revisar el contrato de construcción de los submarinos, pero posteriormente modificó su opinión.

Ceroni pide a la Armada aclarar si este cambio de opinión está relacionado con los fondos que Bazán entregó a Seapoint. Arancibia, que hace un mes renunció a su cargo de comandante en jefe para presentarse como candidato a senador por el pinochetismo, logró que Bazán y DCN aumentaran recursos extras previstos para gastos de representación y que presumiblemente se destinaron a financiar al arrestado ex dictador, según el diario electronico Primera Línea, lo que niega el actual jefe de la Armada. El subsecretario de Marina, Angel Flisfish, afirmó que Bazán debe responder a quién entregó los fondos y con qué destino.

De momento, sólo sospechas Hasta ahora la comisión sólo tiene sospechas y más preguntas que respuestas. El ex ministro Pérez Yoma defendió ante los diputados la transparencia de la compra a Bazán y DCN y afirmó que la decisión técnica la tomó la Armada, porque los submarinos son los que mejor se adaptan a las necesidades chilenas y por precio. Consultado sobre si hubo desvío de dinero para el caso Pinochet, afirmó que no tenía antecedentes y que para ese momento ya había dejado el cargo. Después de su declaración hubo un áspero debate en la comisión. Un parlamentario de la derecha pidió pruebas. Ceroni sostuvo que el trabajo acaba de comenzar e insistió en que, si fuera necesario, varios diputados viajarían a España para buscar pruebas.

La comisión investigadora ha citado a Arancibia, al también ex comandante en jefe de la Armada y actual senador Jorge Martínez Bush y a dos vicealmirantes. También ha instado al Ministerio e Asuntos Exteriores chileno que solicite antecedentes al Tribunal de Cuentas de España e información a la Embajada de Chile en Londres sobre quién, cómo, cuándo y por cuenta de quién se pagó la estancia del ex dictador en Londres.

Este diario ha buscado sin éxito una explicación del Ministerio de Hacienda y de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) sobre cuándo se producirá la comparecencia de Montoro y la entrega del citado contrato. Un portavoz de Bazán, hoy denominada Izar Construcciones Navales, rehusó hacer comentarios.