Empresarios y multinacionales
Las relaciones entre empresarios innovadores y grandes grupos multinacionales son más complejas de lo que puede parecer a primera vista. Algunos empresarios excepcionales, de leyenda, han originado -a veces sin proponérselo- multinacionales, aunque muchas veces se les han escapado de las manos. No es seguro que las multinacionales generen empresarios ni sabemos si hoy existen empresarios de cine. Veamos algunos ejemplos.
En 1897, el ingeniero industrial Lluís Muntadas, hijo del creador (50 años antes) de La España Industrial, puso en marcha, en Cornellà de Llobregat, la Sociedad Industria Eléctrica, que producía material eléctrico. En 1910, se asoció con la multinacional alemana Siemens-Schukert. Noventa años más tarde, la Siemens ha ganado el concurso para construir el TGV Barcelona-Madrid.
Tengo en mis manos un libro titulado: Elizalde 1910- Mercedes Benz España 2000. En él, Mercedes Benz celebra su 90º aniversario con un homenaje a Artur Elizalde i Rouvier, que creó una fábrica de automóviles en el paseo de Sant Joan de Barcelona y murió en París en 1925, y a su viuda, Carme Biada (bisnieta del impulsor del primer ferrocarril español en 1838, La Habana-Güines), que en los 25 años siguientes continuó con la empresa y la convirtió en fábrica de motores de aviación.
En 1919, Isaac Carasso empezó a fabricar un yogur en el Raval de Barcelona destinado a las farmacias del barrio. Se inventó un nombre comercial para su producto: Danone. Era la combinación de: Dan (por su hijo, Daniel) y one (uno, o el primero, en inglés). Años más tarde, Danone abrió sucursal en París. En los años sesenta, la compró Gervais, que a su vez ha sido adquirida por una multinacional del embalaje con un nombre francamente poco atractivo. Tan poco que lo ha cambiado recientemente por otro: Danone.
También en 1919, la Compagnie des Eaux de Barcelone fue adquirida por gente de este país. Éste es el origen de la Sociedad de Aguas de Barcelona, la SGAB, actualmente, AGBAR. En 2000, un ex director de la SGAB, José Antonio Linati Bosch, es embajador en la ONU de un Estado no territorial : la Orden de Malta. En Nueva York contacta con otro catalanohablante: el representante diplomático de Andorra en la ONU.
En 1917, cuatro hermanos empezaron a levantar, en Gavà, lo que que acabaría convirtiéndose en una multinacional del sector hidro-termo-sanitario: Roca Radiadores, con fábricas en varios países de tres continentes y capaz de comprar por 43.000 millones de pesetas a uno de sus más directos competidores: la multinacional suiza Keramic Laufen.
En 1937, en plena guerra de España, se fabricaron los primeros cubitos de concentrado de caldo Gallina Blanca en el sótano del Salón Rosa del paseo de Gràcia de Barcelona. Lluís Carulla, el empresario, descendía de una familia de farmacéuticos de L'Espluga de Francolí. Hoy el Grupo Agrolimen es una multinacional presente en 60 países del mundo.
Pero los empresarios innovadores no se acabaron en 1939. Aquel mismo año, en Buenos Aires, Antoni López Llausas (el hombre de Editorial Catalonia) fundó la Editorial Sudamericana, que en 1997 sería adquirida por el gigante alemán Bertelsmann.
Dos años más tarde, Joan Grijalbo (que había pertenecido, como ugetista, al Consell d'Economia de Catalunya), fundó en México Editorial Atlante, la primera editora, en 1941, del Diccionario de filosofía de Ferrater Mora. Atlante es el precedente de Editorial Grijalbo, que se acabaría convirtiendo en una multinacional de la edición y se uniría al grupo italiano Mondadori.
En 1945, Jaume Sendra y Llorenç Servitje, dos emigrantes catalanes en México, reinventaron para la población de su nuevo país el pan de molde. Lo llamaron Bimbo. En 2001, Bimbo es una multinacional mexicana con 29 fábricas en Europa y en América.
También en 1945, Pere Permanyer y Francesc X. Bultó construyeron en la calle de Còrsega de Barcelona las primeras Montesa, hoy consideradas 'the mytic catalan motorbike', con un nombre inspirado por una 'Medium Age military order, founded in Barcelona'. En 1958, Montesa exportaba a diferentes países de Europa y América, y a India, Filipinas y Japón. En 1986, la japonesa Honda compró la empresa Montesa como si fuera un edificio del modernismo.
En 1946, dos cuñados empezaron a fabricar en la ex villa de Gràcia botes de cacao en polvo, un producto alimenticio tan peculiar como el Cola-Cao. Medio siglo después, aquella empresa es una multinacional con fábricas en América (Chile y Ecuador), Europa (Polonia) y Asia (China). El cacao de Gràcia ha hecho furor.
Los ejemplos podrían multiplicarse en todas las direcciones. El éxito de estos empresarios innovadores, sin embargo, sólo es posible en un país innovador en todos los terrenos.
Dos notas: por una parte, la idea de Josep Maluquer i Salvador que fue el germen de nuestro Estado de bienestar: la creación, en 1908, del Instituto Nacional de Previsión, siguiendo un modelo propio, basado en el modelo alemán de las cotizaciones sociales; sin el colchón de la seguridad social, el consumo privado sería menos boyante, y los empresarios, menos geniales. Por otra, la importancia crucial en Cataluña (según explicó Ernest Lluch) de las 'empresas colectivas': cajas, mutuas, clubes. Sin la eficacia de las empresas colectivas, ¿existirían genios de la empresa?
Francesc Roca es profesor de Economía de la UB.
