El Congreso enmendará la ley sobre el 'testamento vital'

El Congreso de los Diputados se tomará tiempo para regular por ley el derecho de los españoles a suscribir un documento de voluntades anticipadas, conocido como testamento vital, por el que un enfermo podrá decidir por anticipado qué tipo de cuidados desea recibir al final de su vida para librarse de posibles encarnizamientos terapeúticos e intervenciones médicas innecesarias. Parlamentos de varias comunidades autónomas han legislado ya, o lo están haciendo ahora, sobre esa materia, como desarrollo de la Ley General de Sanidad de 1985, conocida como Ley Lluch en referencia al ministro Ernest Lluch, socialista, asesinado por ETA el año pasado.

Ayer, fecha final del plazo, ningún grupo parlamentario había presentado en la Mesa del Congreso enmienda a la totalidad de la proposición de ley aprobada ya en el Senado el 21 de marzo, pero varios diputados sí registrarán enmiendas parciales para reformar el proyecto en ponencia o en comisión. Así que es probable que el Pleno no pueda aprobar esta iniciativa legislativa hasta finales del próximo otoño porque el plazo de presentación de esas enmiendas parciales, que terminaba ayer, se prorrogó hasta el próximo día 19 a petición del PP, que anunció su intención de reformar la propuesta en profundidad. Los socialistas también lo harán, aunque no han fijado el alcance de esas reformas.

Por su parte, el secretario general de Gestión y Cooperación Sanitaria en el Ministerio de Sanidad, Rubén Moreno, restó trascendencia a las iniciativas de los parlamentos autónomos porque, en su opinión, no hacen otra cosa que regular un hecho que ya se aplica en todos los hospitales. En España la eutanasia activa 'no se plantea, y cualquier otra regulación que hagamos sobre eutanasia pasiva no dejará de ser un ordenamiento de lo que ya de hecho, en nuestros hospitales, de una forma u otra, deciden las familias', dijo Moreno a la agencia Efe.

En cambio, una persona tan empeñada en conseguir para los españoles el derecho a decidir sobre su propia muerte como Juana Teresa Betancor, vicepresidenta de la asociación pro eutanasia Derecho a Morir Dignamente (DMD), se mostró partidaria de que la proposición de ley tramitada por el Congreso sea corregida y ampliada. Entre otras reformas, Betancor cree que la ley debe contemplar medidas que obliguen a los notarios a especificar las voluntades del individuo 'de forma literal'.

Ahora, según la vicepresidenta de DMD, hay notarios que interpretan los deseos del paciente 'en función de sus convicciones', o que, por desconocimiento, consideran ilegal sus peticiones. Juana Teresa Betancor reclama, además, la creación de un registro informático de testamentos vitales, de carácter voluntario.