Navarra se compromete a diagnosticar y tratar los casos de cáncer en un mes

El Gobierno navarro aprobó ayer un plan de lucha contra el cáncer que incluye un novedoso contrato social: en un máximo de un mes, los ciudadanos afectados por esta enfermedad recibirán la confirmación diagnóstica de su dolencia e iniciarán el tratamiento adecuado. Este compromiso se incluye en el Plan Oncológico de Navarra, presentado ayer por el consejero de Salud, Santiago Cervera, y que incluye la construcción de un nuevo centro oncológico en Pamplona, un complejo hospitalario de 7.500 metros cuadrados al que se adscribirán todos los recursos de la sanidad foral en esta materia.

Cervera afirmó que los objetivos básicos del plan, cuya vigencia es de cinco años, son tres: disminuir en un 10% en una década el previsible incremento de la tasa de incidencia del cáncer; mejorar en un 15% la supervivencia relativa a los cinco años de tratamiento y reducir en ese mismo porcentaje la mortalidad.

El Ejecutivo foral prevé gastarse 3.465 millones en el plan. El cáncer, con 2.300 nuevos casos diagnósticos y 1.200 fallecimientos anuales, es la segunda causa de muerte en Navarra y suma el 26,7% de las muertes. La supervivencia a los cinco años llega al 47%, una tasa superior a la media española y que se acerca a la europea.

El plan pretende coordinar todos los programas de prevención y diagnóstico precoz, pero, sobre todo, incorporar nuevas medidas en el campo asistencial. El modelo organizativo y médico garantizará la confirmación diagnóstica de cáncer de cualquier ciudadano en 15 días y el inicio del tratamiento en otros 15.

Otro compromiso del plan es asignar un interlocutor personal a cada paciente y su familia, además de mejorar la accesibilidad y la aplicación de los tratamientos, incluida la quimioterapia, y garantizar a todos los enfermos que los precisen los cuidados paliativos.

Cervera explicó que la disposición asistencial se centrará en el Hospital de Navarra, donde se construirá el nuevo centro oncológico, directamente comunicado con otras instalaciones específicas que se habilitarán en los hospitales de Estella y Tudela.

La consejería de Salud quiere dotar al centro del equipamiento tecnológico más avanzado y prevé la adquisición en radioterapia de tres aceleradores lineales de partículas de última generación, cuyo coste se estima en 700 millones de pesetas. Además, se informatizará el servicio con tecnologías de historia clínica electrónica, telemedicina, tratamiento digital de imagen, videoconferencia e Internet en sus servicios.

Cervera recordó que, siguiendo la directrices de la OMS, el centro prestará especial atención a los tumores urológicos, colorrectales, de pulmón, de mama, hematológicos, hepato-pancreáticos, ginecológicos, esófago-gástricos, de cabeza o cuello y el cáncer dermatológico