Perales recrimina al PP por pedir la derogación de ayudas para inmigrantes pactadas con el Gobierno

Alfonso Perales y el coordinador regional de IU, Diego Valderas, coincidieron en defender el decreto de alojamientos frente a las críticas proferidas por el secretario regional del PP, Antonio Sanz, quien pidió su derogación el pasado fin de semana tras reunirse en Almería con varios alcaldes. Valderas, que apostó por 'impulsar' actuaciones en materia de vivienda para integrar al colectivo, dijo que algunos representantes del PP 'favorecen la xenofobia y el racismo'.

El tono de Perales fue menos duro, pero incidió en la contradicción del dirigente regional del PP al criticar un decreto 'pactado al 50%' entre las Administraciones central y autonómica. El contenido, así como las ayudas previstas, fueron consensuadas entre responsables del Ministerio de Fomento y la Consejería de Obras Públicas para resolver la falta de alojamientos dignos de los inmigrantes, tras los sucesos de febrero de 2000 ocurridos en El Ejido. El decreto establece ayudas para la construcción de unidades habitacionales o viviendas en alquiler para temporeros (nacionales o extranjeros) en 42 municipios de Andalucía.

Valderas pidió incluso a la Junta de Andalucía que actúe contra los ayuntamientos que están bloqueando el desarrollo del decreto, como ocurre en casi todos los municipios de Almería con altas concentraciones de inmigrantes, aunque el consejero de Gobernación replicó que esperarán hasta el 31 de diciembre, cuando finaliza el plazo para la presentación de solicitudes, para evaluar su eficacia y adoptar nuevas medidas.

La reunión entre el titular de Gobernación y el coordinador regional de IU, que estuvo acompañado por la responsable de Movimientos Sociales, Inmigración y Política Social, Ángela Aguilera, se enmarca en la ronda de contactos institucionales iniciados por Alfonso Perales para presentar el plan integral de la inmigración. El borrador fija las medidas de la Administración andaluza en materia inmigratoria hasta 2004 y prevé un presupuesto global de unos 51.000 millones de pesetas.

La escasez presupuestaria fue una de las escasas críticas esgrimidas ayer por los dirigentes de IU en relación con el plan, que consideran un instrumento positivo aunque no muy ambicioso. Ángela Aguilera criticó la escasa previsión de futuro en temas como el progresivo incremento de inmigrantes en las aulas. Aguilera pidió, además, que se refuerce el plan con la reforma de la ley de Salud para dejar de considerar la atención a los inmigrantes como excepcional y con la incorporación de extranjeros extracomunitarios a los beneficiarios del salario social. Perales expresó sus dudas sobre la viabilidad de esta medida, además de lamentar 'la lentitud' del salario.