_
_
_
_

2.000 ex presos políticos piden más indemnización por sus años de cárcel

Los represaliados solicitan por carta a Ruiz-Gallardón que interceda

Casi 2.000 represaliados políticos del franquismo, que pasaron en prisión entre uno y tres años, han escrito al presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, para que aumente las indemnizaciones por el tiempo que estuvieron encarcelados por sus ideas. En 1990, estas personas quedaron fuera de las indemnizaciones previstas por el Gobierno central para quienes cumpliesen con la Ley de Amnistía de 1977. La Asamblea les reconoció en 1999 el derecho a ellos también, pero las cantidades aprobadas -50 millones primero y otros 50 después- no dan para nada. El que más, cobraría 150.000 pesetas en un único pago.

Esto es lo que le cuentan al presidente Alberto Ruiz-Gallardón. Le dicen, en una carta enviada hace unas semanas, que está en juego 'la dignidad, lo humano de las personas que, como usted sabe, no dudaron un momento en defender la Democracia y la Paz que hoy disfrutamos todos'.

Es una carta escrita con letra de máquina antigua, respetuosa y limpia, educada y firme: 'Le tenemos como persona dialogante', cuentan. 'Bastante ecuánime', añaden. Pero también afirman sentirse 'tan injustamente tratados que su reputación quedaría por los suelos'.

Quieren un reconocimiento moral, pero también una compensación económica que necesitan. 'Tenemos pensiones muy bajas, porque cuando salíamos de la cárcel no encontrábamos trabajo. Nos pedían certificados de buena conducta de Falange y de la Iglesia. Y no los teníamos. Así que había que trabajar en cualquier cosa, sin derechos, sin nada', desgrana, todavía con voz firme, Angustias Martínez, de 82 años, miembro de la Asociación de Ex Presos Políticos.

Han acudido a la Asamblea porque IU, a través de su diputado Fernando Marín, presentará hoy en el pleno una proposición no de ley para exigir que, como mínimo, la indemnización alcance las 750.000 pesetas. Son casi 2.000 a los que se les ha admitido el derecho a cobrar esa indemnización. A otros 1.000 se les ha denegado. Éste es un país donde siempre falta un papel. 'Si ya tenemos el reconocimiento de presos políticos, de ser amnistiados por nuestra condición de políticos, a qué pedir nuevos papeles que, además, no piden en otros sitios', dice Gervasio Puerta. Porque en Navarra y en Cataluña, por ejemplo, las cosas no son así. Cuentan que allí han dado más facilidades, no les han mareado con papeleos que les arrastran por ventanillas y despachos, por esa 'humedad de los juzgados', que decía Miguel Hernández.

Quieren recibir esa compensación económica, pero, sobre todo, quieren hacerlo con dignidad. Aunque, a veces, a veces... Lo explica Angustias Martínez: 'Tengo 82 años. Y no soy de las más viejas. Fíjense los demás... ¿Saben ustedes? A veces hay que olvidar la dignidad, porque puede más la necesidad. Ya nos gustaría tirárselo [el dinero] a la cara. Pero es tanta la necesidad'.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_