Jordi Pujol destinó 935 millones desde 1990 a entidades valencianas para actividades culturales

Según escribe el consejero de Cultura, Jordi Vilajoana, en una respuesta por escrito al diputado del Partido Popular (PP) Daniel Sirera, la Generalitat de Cataluña distribuyó en la década pasada 1.127 millones de pesetas entre entidades culturales de la Comunidad Valenciana y de las Islas Baleares.

La mayor parte de las subvenciones han ido a parar a fundaciones vinculadas de alguna manera a los Premis Octubre, la actividad más importante de la cultura y del ámbito lingüístico catalán en la ciudad de Valencia, impulsados por el editor y activista cultural Eliseu Climent. Estas actividades han sido vistas con recelo por los sucesivos gobiernos autonómicos, especialmente desde que el PP llegó al Consell, en 1995, que las ha combatido abiertamente, hasta el punto de no prestar ningún apoyo a la inicitiva que reúne a centenares de intelectuales y estudiantes, e incluso de obstaculizar su celebración.

Unas pocas entidades concentraron las subvenciones: En Valencia, la Fundació Ausiàs March obtuvo entre 1990 y el 2000 un total de 328 millones de pesetas; la Francesc Eiximenis, 297; y la Ramon Muntaner, 186, mientras que Acció Cultural del País Valencià, dirigida por el editor Eliseu Climent, consiguió entre 1996 y el 2000 un total de 110 millones de pesetas. En las Islas Baleares los fondos se han destinado básicamente a la Obra Cultural Balear, la entidad que instaló los repetidores para poder seguir las emisiones de TV-3: entre 1990 y 1997 recibió subvenciones de la Generalitat de Cataluña por valor de 141 millones de pesetas.

La mayor parte de las partidas han sido asignadas para 'actividades de difusión cultural'. No obstante, la lista facilitado por Jordi Vilajoana detalla algunas de las partidas. La Fundació Ausiàs March obtuvo 20 millones en 1998 para organizar un simposio sobre el Císter en el marco de los Premis Octubre, mientras que la Francesc Eiximenis recibió 17 millones en 1997 para organizar un congreso sobre el pensamiento al final del milenio y otros 28 millones para un congreso que celebró en el 2000 sobre el pensamiento nacionalista. Todos ellos, dentro del marco de la semana cultural de los Octubre. Por su parte la Fundació Ramon Muntaner fue subvencionada en 1998 con 18 millones de pesetas para afrontar el séptimo encuentro internacional de Asociaciones de Catalanística y otras actividades.

Los 110 millones de pesetas que el Gobierno de Pujol destinó a Acció Cultural del País Valencià en cinco años se dedicaron especialmente a promocionar varias campañas de música popular. Al concierto Germania, organizado por dicha asociación, destinó 20 millones de pesetas.

Las entidades valencianas defensoras de la lengua catalana han tenido un trato preferente en los presupuestos específicos del Departamento de Cultura catalán en los últimos años. Así queda de manifiesto en una respuesta del Gobierno catalán al diputado del Grupo Socialista-Ciutadans pel Canvi Joan Surroca, que se interesó por las partidas otorgadas a las fundaciones. En los últimos cuatro ejercicios, tres fundaciones valencianas -Ausiàs March, Bernat Metge y Francesc Eiximenis- han obtenido una media del 15% de los recursos destinados a esta partida.

En alguna ocasión, como en los años 1997 y 1999, dichas entidades han conseguido subvenciones que superan el 20% del total y todas ellas se encontraban entre las seis fundaciones que más dinero recibieron de Cultura de la Generalitat de Cataluña. Otras entidades valencianas que han recibido ayudas del Gobierno de Pujol, aunque más modestas, son La Mata de Jonc (12,4 millones), Josep Renau (7,5 millones) y Jaume Roig (7,9 millones, aunque ésta a finales de los años ochenta).