Varapalo del 'síndic' a la Ley de Extranjería

El defensor del pueblo catalán muestra su preocupación por 'la falta de respuesta' de la actual Ley de Extranjería respecto a la situación de los inmigrantes con una orden de retorno que no se puede ejecutar por falta de acuerdos bilaterales para la readmisión de estas personas a sus países de origen.

Cañellas reclama infraestructuras o servicios para 'acoger a los inmigrantes en un primer momento y facilitar que se integren en la sociedad' mientras la orden de retorno no pueda materializarse. El síndic recuerda el 'desamparo y la desatención continuada' que los subsaharianos que pernoctaron durante varias noches al raso en la plaza de Catalunya de Barcelona sufrieron el pasado mes de julio y critica el papel que desempeñó la Delegación de Gobierno ante el conflicto, ya que se negó a facilitarles alimento y un techo alegando que era una competencia de las administraciones autonómica y local. 'Si el Gobierno del Estado, en el ejercicio de sus competencias, decidió trasladar a estas personas a Barcelona, debía haber previsto las consecuencias'. 'El diseño, de manera conjunta con el resto de administraciones, de un programa de atención habría facilitado una capacidad de respuesta que habría evitado la desatención que sufrieron', estos inmigrantes, añade Cañellas.

En su informe, el síndic advierte que es 'inviable' la pretensión de la Administración central de 'poner el contador a cero' una vez finalizados los procesos de regularización porque 'la inmigración irregular no desaparecerá'.

El defensor del pueblo catalán critica asimismo que las representaciones diplomáticas de España en el exterior encargadas de tramitar visados para inmigrantes funcionan 'pésimamente' y asegura que hay una falta de 'recursos humanos y materiales' tanto en los consulados y embajadas como en las oficinas de extranjería en el interior, 'como se pone de manifiesto en las continuas colas ante la oficina de Extranjería de Barcelona'. 'Las representaciones de la Administración española en el exterior tienen un papel muy importante para gestionar la llegada de inmigrantes, y hasta ahora no han funcionado suficientemente bien', afirma.

Cañellas cuestiona también el punto de la Ley de Extranjería que no reconoce 'en absoluto' el derecho de reunión a los inmigrantes sin papeles, mientras que, en cambio, es muy difícil expulsarlos si están implicados en procedimientos penales leves, incluso en supuestos de multirreincidencia. El informe del síndic referente al año 2000, que fue entregado al Parlament la semana pasada, plantea otras cuestiones relativas al funcionamiento de las administraciones, entre ellas las siguientes:

- Violencia doméstica

Cañellas considera que la actual legislación deja cabos sueltos para atajar el problema, ya que no siempre se autoriza a acumular las denuncias por malos tratos, y en casos considerados como faltas no se adoptan medidas cautelares. También denuncia la 'falta de agilización en la tramitación de algunos expedientes judiciales' y propone reformar hasta seis leyes estatales para afrontar de manera adecuada los malos tratos. El síndic hace mención especial de las mujeres maltratadas inmigrantes y afirma que las casas de acogida no están adaptadas a estas mujeres 'de otras lenguas y costumbres'.

- Infancia

Reclama Cañellas que se incrementen las ayudas a los padres con uno o más hijos disminuidos y con escasos recursos económicos. Estos padres 'encuentran todo tipo de obstáculos para facilitar el cuidado de sus hijos', señala.

- Seguridad ciudadana

El informe alerta de la inseguridad ciudadana en Barcelona y su área metropolitana, y la atribuye a la falta de efectivos de policía cuando aún no se han desplegado los Mossos d'Esquadra en esta área.

- Prisiones

Critica el síndic la supresión de la redención de penas por trabajo y la reducción de expectativas de permisos de salida o de tercer grado, lo cual atribuye a una 'interpretación restrictiva de la legislación'. Ello provoca, asegura, 'un aumento de la conflictividad en los centros penitenciarios'.

- Sanidad

La inacabada reforma de la atención primaria sigue suponiendo un agravio para los pacientes de zonas donde el proceso no ha finalizado. Cañellas reprocha también a la Generalitat que, pese a sus reiteradas recomendaciones, no hubiera afrontado con determinación el problema de las listas de espera para intervenciones quirúrgicas hasta que el año pasado salieron a la luz pública denuncias de cardiólogos sobre muertes de personas que esperaban ser intervenidas.