Identificados los factores de riesgo de lipodistrofia en la terapia del sida
A falta de una vacuna o un remedio curativo, los actuales cócteles de fármacos para tratar la infección por VIH y el sida han conseguido al menos aumentar la supervivencia. Pero quedan pendientes problemas como la simplificación de las engorrosas pautas de administración de un montón de pastillas diarias y los efectos adversos que producen. De todos ellos, uno de los más preocupantes y el más aparente es la lipodistrofia, una alteración del metabolismo de los lípidos que provoca una redistribución de la grasa corporal con especial acumulación en zonas como la barriga, las mamas o la nuca.
El riesgo de padecer esta complicación no puede atribuirse a ningún fármaco concreto ni depende sólo del tratamiento, como se creía, sino que hay otros factores de riesgo implicados, como la edad, la duración de la terapia antirretroviral o el hecho biológico de ser mujer, según han revelado investigadores españoles en un trabajo que se publica en el último número de la revista The Lancet.
La principal consecuencia práctica de la identificación de estos factores de riesgo es que 'hay que individualizar mejor el tratamiento y hay que ser más conservador a la hora de iniciarlo', afirma José María Gatell, jefe de la sección de enfermedades infecciosas del hospital Clínico de Barcelona y uno de los autores del estudio. Pero advierte: 'Nunca hay que retrasarlo tanto como para poner en peligro al paciente, porque siempre será preferible una lipodistrofia que, por ejemplo, una meningitis tuberculosa'.
Incidencia elevada
En los 18 meses de seguimiento de los 494 pacientes que participaron en la investigación (técnicamente, se trata de un estudio de cohorte prospectivo), un 17% acabó desarrollando algún tipo de lipodistrofia. 'A los dos años de tratamiento la incidencia de lipodistrofia clínicamente aparente se sitúa en torno al 20%, una cifra que está en consonancia con las de los CDC '. Aunque se suponía elevada, hasta ahora la incidencia real no era bien conocida. Algunos estudios barajan cifras del 60% o del 70%, pero esta alta proporción se debe, según Gatell, a que en estos casos se incluye en la muestra a pacientes que llevan muchos años de tratamiento.
La investigación de los factores de riesgo de la lipodistrofia ha revelado que las mujeres tienen casi el doble de riesgo de sufrirla que los hombres, y que el riesgo aumenta con la edad y la duración del tratamiento antirretroviral. Los usuarios de drogas por vía intravenosa presentaron un menor riesgo que los homosexuales o heterosexuales, pero esto 'es un factor de confusión', según Gatell, 'porque estos pacientes en general cumplen menos el tratamiento'.
Aparte de sus connotaciones antiestéticas, la lipodistrofia, que fue descrita formalmente como una complicación del tratamiento del sida en 1998, puede suponer a largo plazo un mayor riesgo cardiovascular, sobre todo si el paciente es fumador o tiene las cifras de colesterol y triglicéridos en sangre elevadas. 'Es una de las complicaciones que más molestan a los pacientes y que más problemas está creando para seguir los tratamientos', asegura Gatell, que será el presidente de la próxima Conferencia Internacional del Sida que se celebrará en 2002 en Barcelona.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.