Patronal y sindicatos tensan el diálogo hasta colocarlo al borde de la ruptura

Los negociadores de la patronal y de los sindicatos CC OO y UGT se acusan mutuamente de haber bloqueado el diálogo sobre la reforma del mercado de trabajo. Ninguna de las partes se muestra dispuesta a ceder en sus principales propuestas, y han mostrado una especial dureza en sus estrategias en los últimos encuentros, incluido el del pasado martes convocado por el ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio. Su intento de desbloqueo no tuvo eco en el presidente de la patronal, José María Cuevas, ni en los secretarios generales de CC OO y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méndez.

La CEOE acusa a las centrales de querer mantener la regulación para los contratos fijos fijada en la reforma de 1997. La propuesta de la confederación empresarial, que todavía no ha expresado por escrito, se centra en generalizar a todos los nuevos contratos un coste del despido improcedente de 33 días por año trabajado, vigente desde 1997 como figura de fomento de empleo. Junto a ello, sugiere un nuevo contrato fijo para colectivos con dificultades de volver al mercado de trabajo, con una indemnización por despido de 25 días.

Aunque CEOE admite respetar los derechos adquiridos para los actuales trabajadores con relación laboral indefinida, quiere que para el futuro se elimine del Estatuto de los Trabajadores la figura de contrato fijo con indemnización por despido de 45 días.

Junto a ello propone una nueva regulación del contrato a tiempo parcial, con una flexibilidad que, a su juicio, no tiene la pactada por el Gobierno y los sindicatos hace cuatro años y que la patronal no apoyó. Esos cambios se desarrollarán más en el documento que la CEOE prepara y que quiere tener ultimado la próxima semana.

Retroceso de posiciones

Para los sindicatos, esas propuesta de la confederación empresarial suponen 'un retroceso a las posiciones que sostuvo al inicio del diálogo', lo que 'aleja las posibilidades de alcanzar un acuerdo'. En un documento conjunto difundido ayer, las dos centrales señalan que, en contra de lo manifestado en los primeros días de febrero, Cuevas declaró en la reunión con Aparicio que sólo ve posible el acuerdo 'si se rebajan sustancialmente los derechos de los trabajadores en materia de protección ante al despido'.

Para los sindicatos, la patronal sólo se limita a hacer propuestas que 'debilitan los derechos de los trabajadores y la capacidad de intervención de sus representantes, y la capacidad de defensa jurídica en los casos de despido, menospreciando el valor de una negociación basada en la autonomía de las partes'.

De momento, los sindicatos, que ya presentaron sus propuestas por escrito el pasado 11 de octubre, avanzan que la patronal se opone 'rotundamente' a que la contratación temporal responda a una causa objetiva que la justifique, y que es 'reticente' a modificar la actual regulación de las distintas modalidades de contratos temporales (de obra, eventual e interinidad).

Sí han detectado que la CEOE se muestra dispuesta a introducir 'algún límite temporal' en el encadenamiento de contratos eventuales para un mismo trabajador, aunque aún no ha precisado cuál sería el periodo de referencia, y a hablar acerca de la propuesta sindical de añadir un sobrecoste a los contratos eventuales. No obstante, para la patronal, este sobrecoste deberá venir por la vía de las indemnizaciones al finalizar el contrato, no por el aumento de cotizaciones, como sugieren las centrales.

Respecto al tiempo parcial, cuya regulación actual es considerada 'adecuada' por los sindicatos, éstos aseguran que la patronal pretende incrementar la disponibilidad de los trabajadores, eliminando la actual delimitación y las garantías sobre la distribución de la jornada y el horario. Asimismo, CC.OO. y UGT manifiestan que la patronal se opone 'radicalmente' a revisar las condiciones de las empresas de subcontratas y a negociar sobre la reducción del tiempo de trabajo, con el horizonte de la jornada semanal de 35 horas, y a limitar la realización de las horas extraordinarias.