Los favores que Chávez debe a Montesinos
Los dos pilares de la red han escapado. Alberto Fujimori puede sentirse seguro en Tokio, protegido en su nacionalidad japonesa, escribiendo sus memorias. Vladimiro Montesinos se oculta en algún país latinoamericano, probablemente Venezuela, donde el presidente Hugo Chávez tiene buenas razones para devolver viejos favores a su amigo. El líder venezolano estudió en la Academia Militar de Chorrillos, la misma de la que salió cadete Montesinos. Ambos tuvieron el mismo instructor: el general Salazar Monroe, que luego sería jefe formal del servicio de inteligencia. Tras el golpe de Estado fallido de Chávez, unos cuarenta de sus oficiales fueron acogidos en Perú por Montesinos, que les brindó toda clase de apoyos de dependencias militares y del SIN. En la recta final de Fujimori, Salazar Monroe fue nombrado embajador en Costa Rica y México. Los dos Gobiernos negaron el plácet, por proceder del controvertido SIN.
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