Salud cifra en 92 las personas tratadas con sangre infectada
El viceconsejero de Salud, Ignacio Moreno reconoció ayer que en Andalucía, entre los años 1996 y 1997, fueron 92 los pacientes tratados con Amerscan Pulmonate II, un radiofármacos elaborados con plasma sanguíneo procedente de un paciente británico enfermo del mal de las vacas locas (una nueva variante de la enfermedad de Creutzfeldt Jacob). Los pacientes fueron tratados en los hospitales públicos Virgen de las Nieves de Granada y Carlos Haya de Málaga. El fármaco en cuestión, utilizado también en no menos de 20 centros sanitarios de todo el Estado, se utilizaba para diagnosticar tromboembolismo pulmonar, una grave dolencia respiratoria. La sospecha de que podía estar contaminado obligó a las autoridades sanitarias estatales a retirarlo en noviembre de 1997.
Desde entonces, según la Consejería de Salud, todos los enfermos tratados con Amerscan han tenido un seguimiento exhaustivo y periódico sin que hasta el momento se haya detectado en ninguno de ellos la menor anomalía. En Salud aseguran que, probablemente, este seguimiento va a realizarse durante toda la vida.
El SAS recuerda también que no se conoce en el mundo ningún caso declarado de esta enfermedad del que pueda decirse que el contagio se ha producido por vía sanguínea.
La confusión y, en todo caso, la información poco clara, parece ser, sin embargo, el principal argumento de políticos y responsables sanitarios a la hora de hablar de esta enfermedad.
A las distintas cifras facilitadas en días pasados sobre el número de pacientes tratados en Andalucía con Amerscan, ahora se añade, y se asegura, que el 'informe confidencial y exhaustivo de julio de 2000 [ver El País de ayer], elaborado por el Ministerio, en el que se recomendaba informar a los pacientes afectados de la situación, no llegó nunca a la sanidad andaluza', afirman en la Consejería.
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