_
_
_
_
_
Entrevista:Michael Douglas | Actor y productor

'La mayor parte de las películas buenas de verdad son ajenas a los grandes estudios'

El actor y productor Michael Douglas, de 56 años, cree que la mayor parte de las buenas películas están fuera del sistema de los grandes estudios de Hollywood. Tras varios fracasos en los últimos años, ahora está encantado con la buena acogida de sus dos últimos filmes: Jóvenes prodigiosos y Traffic, aunque cree que ha llegado el momento de cambiar de registro.Hace unos pocos años, después de un largo periodo de éxitos como productor relativamente regulares, entre los que se encuentran el Oscar a la producción por Alguien voló sobre el nido del cuco, en 1975, y el de interpretación por Wall Street, en 1987, Michael Douglas se encontró de repente con una serie de fracasos de taquilla y una vida sentimental destrozada. La que había sido su mujer durante casi dos décadas, Diandra, se separó de él en 1995. Su hijo Cameron tuvo una escaramuza por el abuso de sustancias tóxicas que llegó a la prensa amarilla. Y en 1998, cuando Douglas coprotagonizó junto a Gwyneth Paltrow Un asesinato perfecto, otra birria de taquilla, los humoristas hicieron chistes acerca de la incongruencia de que una estrella en edad madura pretendiera estar casado con la inexperta actriz. Pero, de repente, a los 56 años, Michael Douglas vuelve a estar en la cima del mundo.

Al haber aceptado reducir su sueldo normal para aparecer en dos películas: Wonder boys (Jóvenes prodigiosos), que se estrenó en España el año pasado, de Curtis Hanson, y Traffic (q ue se estrena en España el próximo viernes), de Steven Soderbergh, Douglas se encuentra ahora no sólo en la mayoría de las listas de posibles candidatos al premio de la Academia (muy probablemente como mejor actor por Wonder boys, en la que representa a un colgado profesor de inglés cuya vida se sale de control), sino también en dos del puñado de películas que están entre las principales candidatas al Oscar a la mejor película. Al mismo tiempo, su vida privada parece haber resucitado al casarse el año pasado con la actriz Catherine Zeta-Jones, de 31 años, después de que ella le diera un hijo, Dylan.

'Yo no hago tantas películas', afirma Douglas. 'Wonder boys la rodamos en 1999. Se suponía que iba a salir con tiempo para competir en los oscars de ese año, pero se retrasó hasta el pasado mes de febrero. Y, luego, Traffic fue muy deprisa el pasado año, y era un papel secundario, sólo unas cuantas semanas de trabajo'.

En 30 años de carrera, Douglas ha hecho sólo un par de docenas de películas. 'Intento hacer papeles que sean diferentes, pero también quiero asegurarme de que yo creo que va a ser una buena película. Y de ésas no ha habido muchas. Yo creo que ahora, más que nunca, en los últimos años, a medida que los estudios han empezado a formar parte de corporaciones cada vez mayores, el factor de riesgo parece estar disminuyendo. Incluso este año, si te fijas, la mayor parte de las películas que fueron buenas de verdad, y que están ahora apareciendo en las listas de premios, vienen de fuera del sistema de estudio, en mayor o menor grado'.

Douglas está encantado y sorprendido de la manera en que Wonder boys resurgió a finales del año pasado como pretendiente al Oscar. Cuando la Paramount Pictures decidió retrasar el estreno de la película hasta principios de 2000, muchos se temieron que se hundiría entre el aluvión de candidatos al Oscar de 1999, aún en los cines. Y eso fue exactamente lo que sucedió. Con una estrategia poco frecuente, la Paramount decidió posponer el estreno del vídeo de la película y volver a reestrenarla en los cines en noviembre. La película tampoco arrasó en taquilla esta vez, pero volvió a conectar con las mentes de los críticos. 'Pensaba que el guión, de Steve Kloves, tenía algunos de los mejores personajes que había visto en mi vida', dice Douglas. Le proporcionó algunas de las mejores críticas de su carrera.

Traffic tiene una trayectoria muy diferente. Douglas había rechazado el proyecto al principio, temiéndose que su personaje -un juez de Ohio que se convierte en el zar federal de las drogas, para ver cómo su propia hija se convierte en una adicta- reaccionaba de forma exagerada. Durante varias semanas, Harrison Ford se planteó la posibilidad de aceptar el papel, y durante esta fase se hicieron cambios en las escenas del personaje. Al final, Ford se decidió por otra película, pero los cambios permanecieron. 'O bien Harrison es muy listo o alguien que trabaja para él lo es, porque cuando me volvieron a mandar el guión, de repente era mucho mejor y el personaje no era tan visceral. Lo volví a leer y dije: 'Vale, ahora sí lo veo'.

Douglas también ha decidido retomar la producción. Su nueva compañía, Further Films, contribuyó a hacer One night at McCool's, del noruego Harald Zwart, que se estrenará en abril y en la que Douglas tiene, además, un papel secundario. Tiene también otros proyectos. En uno de ellos es posible que trabaje con su mujer, y sería algo poco habitual en él, una película de época. 'Siempre me he sentido atraído por las historias contemporáneas, pero eso puede ser una limitación. Creo que estoy preparado para hacer otra cosa. Yo creo que he agotado mi repertorio de tipos avariciosos y angustiados. Puede que busque más películas de época'.

© The New York Times.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_