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Oporto 2001 renueva sus centros culturales y la propia ciudad como capital europea

Sólo un 12% de los 34.000 millones de pesetas se invierte en los 450 actos programados

El objetivo de la organización no sólo consiste en ofrecer un amplio programa de espectáculos a lo largo de este año, sino también 'engendrar una dinámica nueva en la vida cultural de la ciudad de forma que las marcas del 2001 se extiendan hacia el futuro y, en definitiva, contribuyan a situar a Oporto en el circuito de las ciudades europeas y de cultura dignas de visitar'.

La presidenta de la sociedad organizadora, Teresa Lago, destaca entre la amplia oferta para este año la exposición dedicada al arquitecto Siza Vieira, 'una figura sin igual de la cultura contemporánea que ya ha dejado su impronta en ciudades como Lisboa, Santiago de Compostela, Berlín o Venecia'; The first story, una muestra sobre la producción femenina en el arte actual; El puente de los sueños, un proyecto escénico que se desarrollará en la ribera del Duero; o el ciclo de conferencias que reunirá a un grupo de destacados intelectuales y pensadores para debatir sobre el futuro de nuestras sociedades.

Además de sus sugerencias cabe subrayar las noches del verano 2001, que concentrarán durante todos los fines de semana las grandes bandas y figuras de la música cubana, brasileña, y africana, así como los espectáculos de animación nocturna por toda la ciudad, en especial junto a la famosa ribera portuense.

Además se organizará un megafestival de jazz, una ambiciosa edición del festival de cine fantástico (Fantasporto), un documental sobre la ciudad realizado por Manoel de Oliveira, decenas de obras de teatro y danza, o un ciclo de conferencias dedicadas a la literatura femenina.

El paisaje

El director del Museo Serralves de Arte Contemporáneo, el valenciano Vicente Todolí, explica que el centro decidió buscar un tema que fuese el hilo conductor de las exposiciones de 2001. 'Basándonos en nuestro parque, que dialoga con la casa art déco y el museo, decidimos que el paisaje sería nuestro motivo. Antes el paisaje sólo se utilizaba como telón de fondo, pero llegó un momento en que se convirtió en vehículo de su propio mensaje'.

Por ese motivo, el Museo Serralves ya ha inaugurado la exposición In the Rough, con obras de Rembrant, Rubens, Gaugin, Monet, Kandinsky o Dalí, procedentes del Museo Boijmans Van Beuningen. De julio a septiembre, el Serralves divulgará la obra paisajística de Amadeo Souza-Cardoso y de Piet Mondrian, dos pintores que coincidieron en París y se caracterizaron por el vanguardismo de sus lienzos. Vicente Todolí destaca también la exposición de Richard Serra y Oldenburg, y una muestra sobre el paisaje en el arte italiano.

La organización prepara Oporto-Ficción, una antología de ficciones sobre la ciudad a cargo de 20 autores portugueses y extranjeros, y 2001 poemas para el futuro, el título de una antología de la poesía universal sobre el destino. De febrero a julio serán organizados debates sobre la literatura femenina, con Sophia de Mello Breyner y Agustina Bessa-Luís, y encuentros de escritores con Richard Zimler. Las grandes orquestas europeas y figuras de la danza contemporánea, como Bill T. Jones, Anne Teresa de Keersmaeker, Mercé Cunningham o William Forsythe, también acudirán a una ciudad que, lamentablemente, permanecerá levantada por obras gran parte de este año.

Una joya sólo para la clausura

La Casa de la Música de Oporto, cuya construcción concluirá a finales de este año, será el único edificio nuevo levantado en Portugal que se dedicará exclusivamente a las presentaciones de diversos tipos de música y ensayos de orquestas. La joya de la capital cultural tendrá como instituciones residentes a la Orquesta Nacional de Oporto y el Remix Ensemble de la Casa de la Música, que, a su vez, constituirá el núcleo de la futura Orquesta de Jóvenes. Proyectada por el arquitecto Rem Koolhaas (premio Pritzker 2000), este edificio poliédrico de 12 plantas, tres de ellas subterráneas, y dos auditorios, será el punto de encuentro de varios géneros musicales y un espacio versátil e interactivo para acoger a nuevos y diversos públicos. Los organizadores de Oporto 2001 explican que el edificio 'pretende desmitificar la noción convencional del concierto, ofreciéndolo como un local apacible, una alternativa abierta al exterior que transporta hacia sí los reflejos de lo cotidiano de la ciudad a través de sus grandes superficies transparentes'. La Casa de la Música dispondrá de un auditorio para 1.300 personas para los conciertos, un pequeño auditorio de 300 asientos para música de cámara o el jazz, ocho salas de ensayo, dos estudios de grabación, una sala de exposiciones, una discoteca y un centro de documentación. El programa incluye un área de cibermúsica para proyectos de investigación con la electrónica.

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