Más de 30.000 plazas universitarias públicas se han quedado vacías en toda España
Un informe del Consejo de Universidades revela el desajuste entre la oferta y la demanda
El fuerte desajuste entre las plazas que ofrecen las universidades y el número de alumnos matriculados alcanzó en el curso 1999-2000, por primera vez, el 10%, lo que representa más de 30.000 plazas sin cubrir. Así se desprende del último estudio realizado por el Consejo de Universidades, que analiza los datos por comunidades, universidades y enseñanzas. El informe será debatido por los rectores el próximo jueves para buscar soluciones a un aumento de plazas vacantes que, de no corregirse, en 2005 llegará al 30%, según un estudio paralelo que presentará el director del Instituto de Robótica de Valencia, Gregorio Martín.
El análisis de la matrícula universitaria en el curso 1999-2000 revela, por primera vez, que en el sistema universitario público español hay un "fuerte desequilibrio de la oferta y la demanda entre las diferentes enseñanzas, de modo que sobran plazas en algunas enseñanzas y deben faltar en otras". Esta conclusión aparece en el informe Oferta, demanda, admisión y matriculación en el sistema universitario público, redactado en noviembre por el Consejo de Universidades con el objetivo de orientar y "tomar las decisiones oportunas, conociendo la situación en cada comunidad y en toda España".El estudio será puesto sobre la mesa como punto de partida del debate que abordarán los consejeros autonómicos, los rectores y los representantes del Ministerio de Educación el miércoles y el jueves de esta semana en Murcia, en sendas reuniones de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) y del Consejo de Universidades.
La conclusión resulta del análisis de los datos por comunidades de admisión y matriculación de los procesos de julio y de septiembre, los cuales muestran el severo desajuste habido entre las 297.606 plazas nuevas ofrecidas en el conjunto de las comunidades autonómas, y la matrícula final, que se cerró con un total de 267.096 alumnos. Es decir, un desequilibrio del 10%, que dejó un saldo de 30. 510 plazas universitarias públicas vacantes.
Este dato se agrava si se tiene en cuenta que las 48 universidades públicas habían admitido inicialmente en primera y segunda opción un total de 283.010 alumnos (15.914 más que los matriculados finalmente) procedentes de selectividad, FP y titulados que inician otra carrera y los admitidos en las pruebas de acceso a mayores de 25 años, lo que permite deducir de entrada que la demanda no parece haber sido lo suficientemente satisfactoria o atractiva a los ojos de los otros 16.000 alumnos que fueron admitidos y que, teniendo plaza, prefirieron no matricularse.
El informe es concluyente, por tanto, respecto a que "el número de matriculados es inferior a las plazas ofrecidas en todas las comunidades", aunque con la excepción de la Comunidad Valenciana. Esta comunidad ha sido tradicionalmente considerada como modelo piloto por tener unas variables que siempre caminan en sintonía con la media nacional. Sin embargo, la situación más equilibrada de esta comunidad también se ha roto. A tenor de los datos de oferta y matriculación del curso 2000-2001, recogidos de momento sólo en tres comunidades (Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana), por primera vez Valencia se ha quedado con un 10% de plazas sin cubrir, según confirma el director del Instituto de Robótica de la Universidad de Valencia, Gregorio Martín. Este catedrático presentará el jueves, en el encuentro organizado por el secretario general del Consejo de Universidades, Vicente Ortega, el análisis preliminar de los datos de este curso en base al estudio en estas tres comunidades. Los resultados permiten afirmar que en la Comunidad Valenciana, de una oferta global de 28.128 plazas para este curso, han quedado vacantes 2.687; en Cataluña, de 39.934 plazas no se han cubierto 3.621, y en la Comunidad de Madrid, de un oferta total de 45.981 plazas, 4.942. Según los datos provisionales, estas plazas ni siquiera se han cubierto en septiembre. "La proporción del 10% de plazas sin cubrir en estas tres comunidades se puede extrapolar al conjunto del sistema público universitario. Con un oferta global de 293.915 plazas, se estima que más de 27.000 no se han cubierto en la matrícula de septiembre, es decir, el desajuste del 10%, que parece consolidarse", apunta Martín. Y advierte que, "siguiendo la evolución demográfica, en cinco años es posible que el desfase entre la oferta y la demanda se sitúe por encima del 30%".
Los desajustes, afectan, aunque de manera distinta también a la oferta de carreras de ciclo largo o corto y por comunidades. Así el Consejo de Universidades anota con sorpresa "los fuertes desequilibrios existentes en la Comunidad de Madrid (con mucha mayor oferta de ciclo largo) y en Castilla y León (con más oferta de ciclo corto)". Pero matiza que, pese a que los desajustes se extienden a Asturias, País Vasco y Andalucía, "la distribución de la oferta por ciclos está próxima al equilibrio", una década después de que entrara en vigor la reforma de las enseñanzas que se implantó el curso 1987-1988. Sin embargo, el aumento de la demanda de estudios de ciclo corto ha crecido, pasando de 592.000 alumnos el año pasado a los 607.000 de este curso. Martín sugiere que habría que analizar las razones económicas, familiares o laborales que hacen que los estudiantes opten por diplomaturas.
El Consejo, por su parte, concluye que "queda clara la resistencia de los estudiantes a moverse de la región, la insuficiencia de la política de becas y, quizás, la falta de información de los estudiantes", tendencias que precisan ser analizadas en puertas de la aplicación del distrito abierto, con el que se abrirá prácticamente a todos estudiantes la posibilidad de pedir plaza en cualquier universidad del territorio en el curso 2003-2004.
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