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Detectados tres focos de 'legionella' en las torres del Puerto Olímpico de Barcelona

Miquel Noguer

Tres de los edificios más emblemáticos del Puerto Olímpico de Barcelona tenían sus sistemas de refrigeración contaminados por la bacteria legionella y podrían ser los focos del brote de neumonía que ha afectado al barrio de la Barceloneta, según el Ayuntamiento y la Generalitat. Las torres de refrigeración en que se ha detectado legionella son del hotel Arts, el restaurante- discoteca Baja Beach Club y el edificio Torre Mapfre. Los responsables sanitarios dieron ayer por cerrado el episodio de legionelosis, que se ha saldado con un muerto y 48 infectados, de los cuales, 16 aún siguen hospitalizados.

Los responsables del Ayuntamiento de Barcelona y del Departamento de Sanidad de la Generalitat afirmaron ayer que probablemente el brote de legionelosis de la Barceloneta tuvo su origen en alguno de estos edificios. Sin embargo, la cuarta teniente de alcalde de Barcelona, Imma Mayol, apeló ayer a la prudencia y aseguró que aún no se dispone de suficientes datos para establecer "una relación causal" entre estas torres y los casos de neumonía por legionella. La bacteria detectada en las torres de refrigeración es la LP serogrupo 1, la misma que se ha aislado en ocho de los enfermos atendidos en el hospital del Mar. Pero los técnicos han advertido de que aún queda por determinar el subgrupo al que pertenece la legionella encontrada en los edificios y compararla con la que se ha aislado en los pacientes. Los resultados de esta última comprobación no se conocerán hasta dentro de unas semanas.

Uno de los técnicos responsables de la investigación explicó gráficamente el punto donde se encuentra la investigación: "Conocemos el nombre de la bacteria, pero no sus apellidos".

Desde el inicio del brote de legionelosis, los técnicos municipales han recogido muestras de 20 torres de refrigeración, 4 fuentes y 16 puntos de la red pública de distribución de agua. Durante estas inspecciones se ordenó el cierre cautelar de la torre de refrigeración del Baja Beach por "deficiencias ajenas al brote", aunque más tarde se supo que estaba contaminada por legionella. Después de ordenar la limpieza de la instalación, la empresa que explota el restaurante-discoteca puso otra vez en marcha la torre el pasado viernes.

El resultado de la investigación iniciada para determinar el origen del brote de legionelosis no ha sorprendido a los técnicos. El director del servicio de Vigilancia Ambiental del Ayuntamiento, Pau Rodríguez, admitió que el haber hallado tres posibles focos "complica bastante las cosas" para de determinar cuál de ellos provocó la epidemia.

Sin embargo, los técnicos han descartado que el brote fuera causado por las tres torres a la vez. También rechazan la posibilidad de que aparezcan nuevos focos de propagación, puesto que los técnicos han analizado todas las torres existentes en el barrio y sus alrededores. A pesar de que un 15% de las torres revisadas han dado positivo a la prueba de detección de la legionella, el Ayuntamiento no prevé ordenar una revisión inmediata de las torres de refrigeración de la ciudad.

Rosemary Trigg, portavoz del hotel Arts, manifestó ayer: "El hotel sigue un programa de mantenimiento constante, con controles específicos cada tres meses en unos prestigiosos laboratorios de la ciudad. Estas pruebas han dado siempre negativo. El último control, realizado el 16 de noviembre, dio también resultado negativo". Los responsables de la discoteca Baja Beach se mostraron ayer sorprendidos por los resultados.

El brote de la Barceloneta ha afectado a 48 personas, una de las cuales murió el pasado día 13. Otras cuatro continuaban ayer ingresadas en la unidad de cuidados intensivos del hospital del Mar.

Los médicos de este centro sanitario y los investigadores del foco coincidieron ayer en dar por finalizado el brote. El consejero de Sanidad, Eduard Rius, aseguró que está "cerrado" puesto que desde el día 18 no ha habido ningún nuevo ingreso.

Vicens Gimenez

Sin peligro para los clientes y empleados

El pequeño ejército de técnicos que las últimas semanas ha peinado el barrio de la Barceloneta en busca del foco infeccioso ha comprobado que muchos sistemas de refrigeración presentan carencias de mantenimiento. El director del Instituto Municipal de la Salud, Antonio Plasencia, cree que el hallazgo de tres torres contaminadas en un radio de 250 metros no es algo "infrecuente". "Esta bacteria es totalmente ubicua y cuanto más buscas, más encuentras".Además, no sólo los inmuebles antiguos o con humedades son susceptibles de alojar el germen. Edificios modernos como el hotel Arts o la Torre Mapfre, auténticos símbolos de la Barcelona olímpica, tampoco están a salvo de la legionella. Pero los técnicos no creen que exista peligro para los usuarios de dichos edificios, puesto que la refrigeración interior y las torres exteriores utilizan diferentes circuitos de agua. "Últimamente se han perfeccionado los sistemas para evitar la propagación de enfermedades en el interior de los edificios. Ahora falta regular mejor las emisiones al exterior", sentenció uno de los responsables municipales.

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Sobre la firma

Miquel Noguer
Es director de la edición Cataluña de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona, ha trabajado en la redacción de Barcelona en Sociedad y Política, posición desde la que ha cubierto buena parte de los acontecimientos del proceso soberanista.

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