Vall d'Hebron conocía la gravedad de la enferma que murió en lista de espera
Los médicos del hospital de Vall d'Hebron conocían desde hacía meses que la paciente de Lleida que murió de una dolencia cardiaca el pasado mes de mayo se encontraba en estado grave y que estaba pendiente de operación. Por ese motivo, la mujer, de 69 años, fue incluida en lista de espera, aunque no fue intervenida hasta que ingresó de urgencias, horas antes de morir. Estos datos figuran en el historial clínico de la paciente que han sido aportados al juzgado y que contradicen la declaración de los médicos ante el juez.
El historial clínico de Ángela Torres obra ya en poder del Juzgado de Instrucción número 6 de Barcelona, después de que lo solicitara el abogado de la familia, Rafael Núñez. Este letrado interpuso el pasado mes de junio la primera querella criminal por la muerte de una paciente en lista de espera, que actualmente se está tramitando por los presuntos delitos de denegación del deber de asistencia y de homicidio profesional imprudente.Ángela Torres fue reconocida por primera vez en Vall d'Hebron el 16 de agosto del año pasado y en el transcurso de esa visita se le anotó en su historial médico "acepta recambio valvular", con lo que los médicos constataban que no era suficiente con el catéter que se le había implantado en el corazón como solución provisional a su dolencia y que necesitaba otra operación.
Ante el agravamiento del estado de salud, la enferma fue reconocida el 5 de noviembre en el centro de asistencia primaria situado en la calle de Prat de la Riba de Lleida, donde el coordinador Jaume Capdevila anotó en el historial: "pendiente de intervención quirúrgica". Sin embargo, el tiempo fue pasando y la operación no llegaba. El pasado 10 de marzo, el hospital Arnau de Vilanova, en el que volvió a ser visitada la mujer, reiteró la anotación: "está en contacto con Vall d'Hebron para cirugía".
El 8 de abril la mujer volvió a ese centro, pero fue derivada por falta de camas al hospital Santa María, donde los médicos telefonearon a Vall d'Hebron y constataron por escrito en el historial médico: "Nos ha comentado (el doctor Figueras, jefe de la unidad coronaria) que hablará con los cirujanos para intervenir lo más rápidamente posible". Esa rapidez nunca llegó y la mujer ingresó el 2 de mayo en el servicio de urgencias aquejada de una dolencia cardiaca. Tres días después fue operada, pero falleció al cabo de 12 horas.
Estos datos contradicen la versión que ofrecieron ante el juez el pasado 29 de junio los responsables médicos de Vall d'Hebron,quienes aseguraron que la paciente no fue incluida en lista de espera hasta el pasado mes de abril.
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