Asuntos pendientes
No sólo Colombia acude a la cumbre con problemas internos. El presidente argentino, Fernando de la Rúa, debe capear en su país una crisis económica con serias consecuencias sociales. Contrariamente a México, Chile y, más erráticamente, Brasil, Argentina dista mucho de haber consolidado su despegue económico, y su capacidad de endeudamiento es reducida por la servidumbre de la deuda externa, que estrangula las finanzas públicas desde hace años. Paraguay, donde la corrupción echó raíces, llegó a Panamá un día después de haber interrumpido el pago de su deuda interna porque si no, dijeron sus autoridades, la economía nacional podría colapsarse.La situación ecuatoriana tampoco es halagüeña. Después del golpe de Estado promovido por los indígenas el pasado mes de enero, Ecuador afronta un proceso de dolarización de la economía de consecuencias imprevisibles. La delegación ecuatoriana pide a la comunidad internacional, y a los acredores, mecanismos para aliviar su elevado endeudamiento.