ETA tenía como objetivos a cinco dirigentes críticos del PNV
El comando Vizcaya de ETA, desarticulado por el Cuerpo Nacional de Policía el pasado viernes, disponía de un listado con casi 200 posibles objetivos para sus atentados, entre los que había diversos políticos del PNV críticos con la actual línea soberanista del partido. Aunque no se conoce el grado de seguimiento o el lugar que ocupaban en la lista, en ella figuraban el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, y el ex consejero de Interior Luis María Retolaza.
'Ertzainas' y policías
La detención de los miembros del comando Vizcaya dio al traste con la comisión de nuevos e inminentes atentados. Este grupo tenía en su poder 80 kilos de dinamita, armas, granadas y diverso material para fabricar bombas, además de diversa documentación, entre la que figuraba el listado de objetivos de este comando. Pero en este caso, junto a conocidos miembros del PP, PSE y Unidad Alavesa (UA), así como empresarios, magistrados, fiscales, periodistas y miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado, aparecen significados miembros del PNV que no comulgan con la línea soberanista iniciada por el PNV tras la firma del Pacto de Lizarra, el 12 de septiembre de 1998. Línea que fue confirmada con la alianza parlamentaria entre el PNV, EA y EH y que ratificó el partido en una asamblea nacional en la que sus compromisarios aprobaron el documento Ser para decidir.Entre los objetivos señalados, que fueron difundidos por la cadena Cope, destacan voces críticas dentro del PNV, como el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna; el actual presidente de la Autopista Vasco Aragonesa, Juan Alberto Pradera, quien es calificado de "elemento del sector españolista del PNV"; Mario Fernández, quien fuera consejero de Presidencia y de Desarrollo Autonómico en el primer Gobierno vasco con Carlos Garaikoetxea, y ahora responsable de asuntos legales del BBVA, al que llaman "defensor del Estatuto", o el ex consejero de Interior Luis María Retolaza. También figura en la lista Jon Zabalía Lezamiz, ex diputado por Vizcaya y ex presidente de la comisión parlamentaria, al que identifican como el "que investigó el caso Mariano Rubio".
Aunque no se conoce el seguimiento que se había hecho de cada uno de ellos porque la lista de objetivos de la clase política se completa con otros 58 miembros del PP, 18 socialistas y cuatro de UA, la inclusión de los nacionalistas críticos supone otro paso de los terroristas por acallar a quien contradiga la unidad nacionalista y el proyecto soberanista.
La dirección del PNV hizo pública una nota de solidaridad y apoyo a "los afiliados del partido amenazados por ETA". "[La inclusión de nuestros afiliados] "confirma que todos somos objetivos de esta banda criminal".
Como es habitual, el grupo de terroristas en el que estaba el detenido Asier Karrera, uno de los presuntos asesinos del portavoz socialista en el Parlamento, Fernando Buesa, incluía entre sus objetivos a mandos y números de la Ertzaintza -un jefe de la comisaría de Getxo-, un agente cuya identidad fue difundida al ser objeto de un secuestro en Suramérica y un antiguo comandante del Ejército que ahora desempeña su trabajo como ertzaina.En la documentación incautada hay 20 folios sobre la familia Delclaux, con datos específicos como teléfonos, bienes, empresas y vehículos utilizados. También aparecen periodistas del País Vasco y otros que participan en tertulias radiofónicas. Entre los objetivos de ETA se incluyen también nueve magistrados y fiscales, empresarios, vehículos de miembros de las FSE, sedes de partidos políticos y distintas personalidades.
En cuanto a los periodistas que figuraban en la lista del comando Vizcaya, destaca la presencia de profesionales vinculados al grupo Correo, a la agencia Vasco Press y otros que participan en tertulias radiofónicas.
El comando Madrid que la semana pasada fue desarticulado había realizado ya los primeros seguimientos y anotado las matrículas de coches oficiales de políticos, jueces y policías, aseguró ayer el director general de la Policía. Juan Cotino añadió que los terroristas -Asier Urretabizkaia, Víctor Goñi, Ainara Esteran y Nerea Garro- formaban un comando "totalmente articulado" y habían planeado perpetrar los primeros atentados con pistolas a la espera de que les llegaran los explosivos.
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