Picasso y Giacometti rompen sus propios récords en 10 minutos de infarto

Mujer con los brazos cruzados, una de las obras más significativas del periodo azul de Picasso, batió todos los récords al ser subastada en la madrugada de ayer en Nueva York por 55 millones de dólares (10.670 millones de pesetas). Fue una venta de infarto. En sólo 10 minutos, un comprador anónimo fue quien pagó en la sala de subastas Christie's el precio más alto registrado hasta ahora por una obra del pintor malagueño. En la misma sesión, también se batió otro récord con una escultura de Alberto Giacometti: Grande femme debout, que superó los 14 millones de dólares (2.716 millones de pesetas), la escultura más cara jamás vendida en una subasta.

Periodo azul

Pero las dos estrellas de la noche no llegaron a ocultar que el primer gran día de la sesión de invierno de Christie's estuvo a punto de convertirse en fracaso. De los 74 lotes originales sólo se consiguió vender 43. "El mercado sólo quiere trabajos de primera calidad y es mucho más selectivo con el resto, sobre todo si las estimaciones han sido demasiado altas", comentó Christopher Burge, presidente honorario de Christie's America. Los 10 intensos y cardiacos minutos que tardó Mujer con los brazos cruzados (Femme aux bras croisés), de Picasso, en venderse valieron el resto de las casi dos aburridas horas que duró la subasta en la sede de Christie's en el Rockefeller Plaza. Tres compradores anónimos, todos por teléfono, fueron apostando, millón de dólares en millón de dólares, sobrepasando rápidamente la estimación más cara, que había cifrado el cuadro en unos 20 millones de dólares. El picasso alcanzó el precio más exorbitante jamás pagado por un cuadro del artista y se convierte así en la quinta obra más cara vendida en una subasta.

Hasta ahora, el récord de Picasso lo ostentaba Las bodas de Pierrette, vendido por 51,6 millones de dólares en París. El récord absoluto lo sigue teniendo Van Gogh con su Retrato del doctor Gachet, que se subastó en Christie's en 1990 por más de 82,5 millones de dólares.

Los resultados mixtos de la velada indican, sin embargo, que Christie's y su rival Sotheby's no se han repuesto del todo del escándalo y la ristra de juicios que llevan salpicando su reputación desde principios de año, bajo la acusación de haber conspirado para fijar precios abusivos en sus operaciones de compraventa. El pasado septiembre, las dos casas acordaron pagar 512 millones de dólares para cerrar la demanda que les habían puesto en los tribunales algo más de cincuenta clientes.

Picasso pintó su Femme aux bras croisés en uno de los momentos más oscuros de su carrera y de su vida, el periodo azul. A principios de 1901, el artista acababa de cosechar su primer gran éxito en París con una serie de cuadros que retrataban la vida alegre de Montmartre y de su colorida fauna. Pero ese mismo año se produjo un cambio radical en su obra. Picasso reconoció luego que este profundo cambio de humor se debió en parte a su primera confrontación directa con la muerte tras el suicidio de su mejor amigo, Carlos Casagemas. El artista empezó, sin duda, a pintar su Femme aux bras croisés en 1901 y lo acabaría entre 1902 y 1903 en Barcelona, adonde solía viajar con frecuencia. El lienzo retrata a una mujer sentada con los brazos cruzados, de pelo negro y túnica blanquecina, con semblante resignado y mirada perdida. Femme aux bras croisés fue primero propiedad de la escritora norteamericana Gertrude Stein. El lienzo pasó luego por varias colecciones privadas europeas hasta acabar en una familia norteamericana que lo conservó durante los últimos 65 años. El público pudo ver el cuadro por primera vez en 1932, en una galería de Zúrich, durante la primera retrospectiva de Picasso, y cuarenta años después, en la exposición organizada por el Instituto de Arte de Chicago, que se lo quedó en préstamo hasta la subasta del pasado miércoles.