Un estudio alerta sobre la falta de prevención de inundaciones en el Ter

El diagnóstico de la cuenca del río Ter que está llevando a cabo el Consorcio Alba-Ter constata la escasa prevención existente en el área ante el riesgo de desbordamiento y alerta sobre la falta de zonas inundables que puedan reducir los efectos catastróficos de una posible crecida. En el estudio se expone la necesidad de utilizar fórmulas de prevención de la inundaciones futuras menos agresivas con el medio ambiente y que pueden ser una alternativa viable a las infraestructuras hidráulicas.

Las recientes y fuertes lluvias, que han causado destrozos en el sur de la provincia de Tarragona, y las inundaciones controladas de zonas en el tramo final del río Ebro han dotado de actualidad y sentido el estudio sobre la prevención de desbordamientos en la cuenca del Ter. El estudio del Consorcio Alba-Ter constata que las infraestructuras son abundantes a lo largo del curso del Ter, que nace en el Ripollès y recorre 167 kilómetros pasando por Ripoll -donde recibe al río Freser-, Torelló, Manlleu, Roda de Ter, Girona -donde se le unen el Onyar y el Terri- y la playa de Pals, donde desemboca. Pese a ello, el riesgo de inundación continúa estando presente en diversos puntos de su cuenca. Las medidas de protección adoptadas por los consistorios son mayoritariamente muros de contención, aunque únicamente 10 de los 57 municipios ribereños tienen alguna regulación urbanística referida a los espacios cercanos al río con riesgo de sufrir inundaciones.

El Ter tiene valoraciones diversas a lo largo de su curso. Mientras que en la zona alta el 72% de la población lo considera positivo, según datos del consistorio, en la cuenca baja el 64% de los habitantes juzga su relación con el río de manera negativa. La primera visión se corresponde con el uso del río para actividades de ocio o al aire libre, mientras que la negativa se produce en riberas que se han convertido en vertederos de residuos.

El estudio de la ribera del Ter incluye también el patrimonio arqueológico y monumental del río. El 85% de sus construcciones y espacios no se utilizan para ningún tipo de planteamiento turístico, cultural o social. El proyecto del Consorcio Alba-Ter tiene como objetivo "retornar el río a los ciudadanos", buscando la implicación de la Administración y la población.

El consorcio ofrece amplia información de sus actuaciones en la dirección de Internet www.albater.org.