¿Qué han conseguido?
Han asesinado a Máximo, a un funcionario de prisiones, a una persona. Lo han hecho por rabia y frustración. Por su incapacidad para escuchar al pueblo vasco y a la sociedad española, que de mil maneras dice firmemente "ETA, no. Paz. Basta ya" y mil lemas diferentes que recogen un deseo común. Han asesinado por su desprecio al diálogo, a la defensa pacífica de las ideas, por el rechazo a quien es diferente, por su racismo. Pero sobre todo han asesinado por su falta de ideas. ETA no tiene nada que aportar a la sociedad vasca, está vacía.Han asesinado a Máximo, una persona que trabajaba atendiendo a las personas privadas de libertad, que acudía diariamente a su centro de trabajo, entre el olvido y la indiferencia de la mayoría de la sociedad hacia los que allí están internos. Una persona que garantizaba el respeto escrupuloso de los derechos de las personas que allí cumplen condena. Asesinando a Máximo nos han asesinado un poco a todos, pero también las pocas expectativas que quedan en muchas personas del colectivo de presos de ETA, que, tras postulados y afirmaciones aparentemente tajantes, sienten tristeza, frustración, desesperación por la situación, y ven apagarse la poca luz de esperanza que les queda por su incapacidad para rebelarse contra tanta muerte y violencia inútil.
Aseinando a Máximo van a conseguir que la sociedad nuevamente se vuelva a unir con un mensaje claro: ETA, no. Esa va a ser nuestra respuesta, cada vez más fuerte, sin fisuras, sin partidismos. Un grito de paz y libertad que debe llegar de forma clara y rotunda a Máximo, a su mujer, a sus hijos, a su familia, a sus compañeros y a todas las víctimas del terrorismo de ETA.- José Luis Alonso. Vitoria.
